Berlín es sede del octavo congreso mundial de Metrópolis, la asociación internacional de representantes de capitales y metrópolis. En la edición 2005 participan 22 alcaldes y representantes de 37 ciudades, entre ellas la anfitriona Berlín, París, Montreal, Toronto, Hanoi, Santiago de Chile, Sao Paulo y ciudad de México.

Objetivos del congreso

"El congreso Metrópolis 2005 ofrece la oportunidad de intercambiar información acerca de problemas básicos de las grandes ciudades modernas: desde los problemas económicos hasta los caminos para estabilizar los barrios menos privilegiados y la protección activa del medio ambiente hasta soluciones para el flujo, cada vez mayor de tráfico", declaró el alcalde de Berlín, Klaus Wowereit, en el acto inaugural del octavo congreso de Metrópolis que tiene como lema "Tradición y transformación -el futuro de la ciudad".

Berlín, con su peculiar historia y desarrollo, es en ese sentido un ejemplo a seguir, pues en una comparación internacional ocupa un muy buen lugar en cuanto a su sistema de transporte público, evacuación y reciclaje de desechos, protección del agua y sus ofertas de zonas verdes y de recreación. "Somos una ciudad verde, con un alto potencial de innovación", declaró la senadora para desarrollo urbanístico, Ingeborg Junge-Reyer.

Berlín: los problemas de una metrópolis

Como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial y la división de la ciudad, la urbe a orillas del Spree vivió medio siglo una situación muy especial. Los cambios políticos en Europa permitieron la reunificación alemana en 1989 , y con ella la de Berlín, que tras la caída del Muro se convirtió en la capital más joven de Europa. Esto supuso un enorme esfuerzo de reconstrucción, tanto de edificios como de infraestructura. Decenas de millones se ha invertido desde 1990 en el mantenimiento y mejora de viviendas, por ejemplo.

En el tráfico de Berlín, de los desplazamientos diarios actualmente alrededor del 35% corresponden a automóviles, alrededor del 27% a transportes públicos y casi un 20% a desplazamientos a pie o en bicicleta. Desde la reunificación, a pesar de que la población metropolitana tan sólo ha crecido un 3%, el tráfico se ha incrementado en casi un 20%, con los consiguientes problemas de contaminación acústica y medioambiental a resolver.

El aporte de una experiencia

El intercambio de experiencias es el principal aporte que esperan tanto participantes como organizadores de Metrópolis. Su gran objetivo es apoyar con ello a la gran meta del milenio: que para el año 2015 la pobreza del mundo haya sido reducida a la mitad, aumentar el acceso al agua y disminuir las carencias en cuanto a la infraestructura sanitaria de los más de 100 millones de habitantes de barrios miseria.

Concretamente, Metrópolis ha aportado a ello con proyectos tales como que Melbourne apoye a México en la planificación de áreas urbanas; Barcelona, Lisboa y París a La Habana en el abastecimiento de agua potable y Barcelona a Guadalajara en el desarrollo de un sistema fiable de eliminación de residuos urbanos. También ha premiado proyectos ejemplares tales como la restauración del casco antiguo de La Habana.

Durante los cuatro días de congreso en Berlín, autoridades, científicos y representantes de la industria mostrarán y presentarán sus logros y problemas en el campo urbanístico. La experiencia y la historia de Berlín como ciudad es mucha, las expectativas del congreso también.