Según fuentes diplomáticas alemanas, Westerwelle discutió con el jefe de Estado yemení sobre los esfuerzos que se realizan a nivel internacional para estabilizar la situación en Yemen, el país más pobre de la península Arábiga, y la ayuda a la lucha contra el terrorismo.

Ya antes de viajar a Yemen, el jefe de la diplomacia alemana había advertido que el país árabe se está convirtiendo en un "refugio para terroristas" de Al Qaida. Según los servicios de seguridad occidentales, el frustrado atentado contra un avión estadounidense en Detroit el día de Navidad fue preparado en Yemen.

Además del terrorismo de Al Qaida, el presidente Salih se enfrenta con el problema de una prolongada lucha armada de rebeldes chiitas en la región fronteriza con Arabia Saudí.

El Ministerio alemán de Relaciones Exteriores expresó el temor de que una mayor desestabilización de Yemen pueda tener efectos negativos sobre toda la región y más allá de ella. dpa

Editor: Claudia Herrera Pahl