El detonante de la carta, firmada por el Prof. Dr. Josef Sayer, Secretario General de MISEREOR, es el envío de policías nacionales y unidades militares a la ciudad de Cajamarca para reprimir un movimiento que tiene como objetivo impedir que se explote oro en el cercano cerro Quilish.

Los campesinos de la zona y la población de Cajamarca temen que la explotación del metal precioso haga disminuir el nivel de aguas y las contamine. La explotación de las vetas de oro del cerro es un proyecto de la empresa Minera Yanacocha, cuya extracción del metal precioso en las cercanías de Cajamarca alcanza ya a 90 toneladas por año y es la mayor de América Latina.

La historia local de la minería se caracteriza desde 1993 por numerosos conflictos sociales, derivados de la contaminación ambiental, disputas por el uso de la tierra y expropiaciones.

"Calma tensa"

"La situación actual en la región es de una calma tensa", dijo Juan Josi, coordinador de programas de MISEREOR para Perú y Ecuador a DW-WORLD. "Si el cerro desaparece, desaparece el agua", agregó.

Y ello tendría consecuencias fatales tanto para los campos de regadío de los campesinos de la zona como para el abastecimiento de agua de Cajamarca. Además, el peligro de contaminación es grande, ya que el oro se explota tratando el mineral extraído con cianuro de sodio, que es extremadamente tóxico. "La población está nerviosa, porque teme lo peor", agregó Josi.

Se estima que las reservas de oro en el corazón del cerro Quilish ascienden a más de 100 toneladas, con un valor de unos 1.500 millones de dólares. En el 2000, el cerro fue declarado en una ordenanza municipal "zona reservada, protegida municipal y provincial" y por lo tanto, no explotable.

Tribunales de Cajamarca, ante los que presentó demanda la Minera Yanacocha, dieron razón a las autoridades municipales. Pero a comienzos de abril de 2003, la Corte Constitucional del Perú falló que la protección del cerro no es legal, lo que le da vía libre a la minera para su explotación.

Represión con gases lacrimógenos

El 2 de septiembre, 3.000 campesinos marcharon sobre el campamento de Minera Yanacocha ya existente en las faldas del cerro, para protestar contra la explotación de oro en el Quilish. La Policía Nacional y unidades militares los reprimieron, lanzando incluso gases lacrimógenos desde helicópteros.

Hubo heridos de ambos lados. Numerosos campesinos fueron detenidos, entre ellos niños, ancianos y mujeres. No obstante, los manifestantes lograron ocupar el cerro y bloquear la ruta que va de Cajamarca a Bambamarca, donde tiene su sede principal la compañía minera.

El 7 de septiembre, unas 7.000 habitantes de Cajamarca se concentraron en la Plaza de Armas, para solidarizarse con los campesinos. En el ínterin, la Minera Yanacocha manifestó haber decidido "suspender los trabajos en el Quillish" y que "está dispuesta al diálogo".

La ciudad de Cajamarca está hermanada con la ciudad alemana de Treptow-Köpenick, cerca de Berlín, cuyas autoridades y ciudadanos siguen también con sumo interés y preocupación los acontecimientos en Perú.