Moscú dice querer cooperar con Berlín en caso Navalny
3 de septiembre de 2020
El Kremlin reiteró sus dudas sobre el envenamiento del líder opositor ruso y afirma que espera un informe oficial de los análisis toxicológicos de Alemania.
"Confirmamos que estamos dispuestos e interesados en una plena cooperación e intercambio de datos al respecto con Alemania", dijo Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, a la agencia Interfax.
Peskov recordó que Moscú aún está esperando que Berlín le informe oficialmente de las conclusiones de sus análisis toxicológicos.
"Nuestros médicos también ofrecieron oficialmente un intercambio de datos, pero, por el momento, lamentablemente, no han recibido respuesta de sus colegas alemanes", subrayó.
Además, aseguró que "hasta el traslado del enfermo a Berlín en línea con todos los estándares internacionales, se realizó toda una serie de análisis en nuestro país y no se halló ninguna sustancia tóxica".
Moscú pide pruebas a Berlín
La portavoz de Exteriores, María Zajárova, pidió a Alemania que entregue cuanto antes en la Embajada rusa en Berlín el material médico que confirme sus conclusiones.
La Embajada rusa en Berlín llamó a evitar la politización del caso y limitarse a analizar datos concretos, al tiempo que confirmó que el embajador, Serguéi Necháev, fue citado al Ministerio de Exteriores alemán. No obstante, informó de que el embajador no recibió información "sustancial" sobre el caso.
El Gobierno alemán aseguró este miércoles que Navalni fue envenenado con una sustancia usada en la producción de armas químicas y que pertenece al grupo del agente tóxico Novichok, el mismo con el que fue envenenado en 2018 en el Reino Unido el antiguo agente ruso Serguéi Skripal, quien no llegó a morir.
Publicidad
Reacciones de indignación
Tras conocerse las conclusiones de Alemania sobre el caso, tanto la Unión Europea (UE) como la OTAN advirtieron que estudiarán las implicaciones de las últimas revelaciones sobre el envenenamiento.
"Es esencial que el Gobierno ruso investigue en profundidad y de forma transparente el intento de asesinato del señor Navalni. Su caso no debe quedar sin resolver (...). La UE continuará siguiendo de cerca el asunto y debatirá sus implicaciones", dijo en un comunicado el alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell.
Otras figuras europeas buscaron los términos más fuertes posibles para denunciar el ataque, con el primer ministro británico Boris Johnson llamándolo "escandaloso" y el jefe de la diplomacia francesa Jean-Yves Le Drian diciendo que era "escandaloso e irresponsable".
La jefa de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, criticó un "acto despreciable y cobarde - una vez más".
"El pueblo ruso tiene derecho a expresar sus opiniones pacíficamente sin temor a represalias de ningún tipo, y ciertamente no con agentes químicos", escribió en Twitter el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, John Ullyot.
Alexei Navalny estuvo hospitalizado con síntomas de envenenamiento y es una de las principales figuras de la oposición rusa. Ha encabezado masivas protestas contra el gobierno de Putin y ha sido detenido varias veces.
Imagen: Imago Images/Itar-Tass/S. Fadeichev
La voz que denuncia
El abogado Alexei Navalny se cuenta entre las principales figuras de la oposición al presidente ruso, Vladimir Putin. Navalny adquirió relevancia pública en 2008, al denunciar en su blog malas prácticas en la esfera política rusa y en algunas de las principales empresas estatales. Sus revelaciones condujeron incluso a renuncias de funcionarios, algo inusual en Rusia.
Imagen: picture-alliance/dpa/TASS/V. Sharifulin
Controvertidas elecciones parlamentarias
En 2011, Navalny fue detenido por primera vez. Pasó 15 días en prisión, por haber liderado una manifestación frente a la Duma en Moscú, en protesta contra las irregularidades denunciadas en los comicios parlamentarios del 4 de diciembre. A su salida de la cárcel, se mostró decidido a continuar con las protestas.
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Stenin
Segunda detención
En 2012, Putin ordenó una investigación policial sobre el pasado de Navalny. Al año siguiente, fue juzgado por malversación de fondos en la ciudad de Kirov y condenado a cinco años de cárcel. Sin embargo, fue liberado al día siguiente, a la espera del resultado de una apelación a un tribunal superior. Posteriormente la sentencia fue suspendida.
Imagen: Reuters
Crece la plataforma de oposición
Pese a verse envuelto en problemas judiciales, Navalny pudo presentar su candidatura a la alcaldía de Moscú en 2013. Obtuvo el segundo lugar en las elecciones, tras Serguei Sobianin, un aliado de Putin. El resultado fue interpretado como un gran éxito por la oposición, que se sintió fortalecida.
Imagen: picture-alliance/dpa
Navalny se abre paso en las redes sociales
Su retórica contraria al Kremlin le cerró el acceso a la televisión estatal rusa. Eso llevó a Navalny a difundir su mensaje político a través de las redes sociales y de su blog. Con su talento oratorio, su lenguaje agudo y su humor irónico, logró movilizar a una legión de seguidores jóvenes.
Imagen: Alexei Navalny/Youtube
Ambiciones presidenciales
En diciembre de 2016, el líder opositor anunció el inicio formal de su campaña para postularse como candidato a la presidencia rusa en las elecciones de 2018. Sin embargo, repetidas acusaciones de corrupción que sus opositores atribuyen a motivaciones políticas, bloquearon su carrera electoral.
Imagen: Getty Images/AFP/K. Kudryavtsev
Sentencia por corrupción
En 2016, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos dictaminó que Rusia había violado el derecho de Navalny a un juicio imparcial en el caso Kirov. Si bien la Corte Suprema Rusa suspendió la sentencia de cinco años de cárcel, el caso retornó a la corte de Kirov. En 2017, esta volvió a condenarlo a cinco años de prisión en suspenso.
Imagen: picture-alliance/Sputnik/A. Kudenko
Multitudinaria protesta en Moscú
En febrero de 2017 se llevaron a cabo manifestaciones contra la corrupción en decenas de ciudades rusas. Más de 1.000 manifestantes fueron detenidos, entre ello, Navalny. En Moscú, se estima que tuvo lugar la mayor protesta registrada desde 2012. Navalny fue liberado 15 días después.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/Evgeny Feldman for Alexey Navalny's campaign
Agresión física
Navalny fue objeto de una agresión con una sustancia química y tuvo que ser hospitalizado en abril de 2017. Su córnea derecha sufrió un daño permanente. Navalny acusó a las autoridades rusas de impedirle buscar tratamiento médico en el exterior, debido a la sentencia en suspenso en su contra. Luego se le permitió viajar a España para someterse a una cirugía.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/E. Feldman
Reiterados arrestos
En 2018, Navalny fue arrestado por 30 días. Tras haber sido puesto en libertad en septiembre, fue detenido nuevamente por 20 días. En abril de 2019, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos determinó que Rusia había violado los derechos de Navalny al mantenerlo bajo arresto domiciliario en 2014, durante el proceso por malversación de fondos en Kirov.
Imagen: Reuters/M. Shemetov
Denuncia de envenenamiento
En julio de 2019, pocas semanas después de haber sido liberado de una cárcel donde pasó diez días, Navalny fue encarcelado nuevamente por 30 días, por violar las estrictas leyes rusas relativas a las manifestaciones. El líder opositor acusó a las autoridades de haberle suministrado mientras estaba en prisión una sustancia tóxica. Sus síntomas recibieron el diagnóstico oficial de "alergia".
Imagen: picture-alliance/AP Photo/navalny.com
Allanamiento y cuentas congeladas
A través de YouTube y otras redes sociales, Navalny había conseguido millones de seguidores a fines de 2019. La policía allanó la central de su Fundación contra la Corrupción (foto) y lo detuvo. Su equipo señaló que los uniformados querían confiscar sus equipos técnicos. Pocos meses después, en marzo, Navalny reportó que sus cuentas bancarias y las de miembros de su familia habían sido congeladas.
Imagen: Reuters/FBK Handout
En estado de coma
El 20 de agosto de 2020, el portavoz de Navalny informó que, tras haber tomado un té en el aeropuerto, el líder opositor se sintió abruptamente mal durante el vuelo. Su estado se deterioró tanto que el avión tuvo que aterrizar de emergencia. Navalny fue llevado a un hospital (foto), donde fue internado en estado de coma, y conectado a un respirador. Sus cercanos sospechan que fue envenenado.