La animación será este año el plato fuerte de “Cuba im Film”, que contará con la presencia de invitados de la talla de Juan Padrón, indispensable de la animación Latinoamericana. Kurt Bovensiepen y Andreas Hesse forman parte del comité organizador del Festival de cine cubano de Fráncfort, que celebra, hasta el 31 de mayo, su XIX.edición.

DW: ¿Cómo surgió la idea de realizar un Festival de cine cubano?

Andreas Hesse: Fue un proyecto común de Filmforum Höchst y La Casa Del Tercer Mundo de Fráncfort. Creemos que la cultura, y especialmente el cine, es el recurso idóneo para acercarse a las sociedades en profundidad. La sociedad cubana es muy particular, tiene características únicas que el cine consigue reflejar muy bien. Este medio siempre ha contado con una gran libertad en la isla para la reflexionar sobre su entorno. Además, nos dimos cuenta de la alta calidad tanto de la cultura como del nivel de las infraestructuras cinematográficas que tienen allá.

¿Cuáles son las peculiaridades de este año?

El tema central este año es el cine de animación. Desde los años 70 Cuba sobresale por los dibujos animados, conocidos como muñequitos, personajes estrambóticos e insolentes como los Filminutos de Juan Padrón. Su personaje Elpidio Valdés es más popular en Cuba que cualquier personaje de Disney. Padrón, con la película “Vampiros en La Habana” (coproducción cubano-alemana) ha logrado un hito en la historia del dibujo animado. Será nuestro invitado y presentará sus películas así como una selección de sus Filminutos. Bárbaro Joel Ortiz presentará una recopilación de cortos y su premiado trabajo“Veinte años”. Además, dentro de la categoría de cine joven, se emitirá “Melaza”, de Carlos Lechuga (primer premio en el Festival Internacional de Mannheim-Heidelberg 2013).

¿Qué otros invitados hay?

Aparte de Juan Padrón, estarán Laura de la Uz y Yasmany Guerrero. Yasmany es un actor de teatro y cine de la nueva generación. Laura es una actriz muy conocida. Ella presentará “La película de Ana” , la última obra del difunto director Daniel Díaz Torres, con la que ha sido galardonada por la mejor actuación femenina en festivales de Cuba y Brasil.

¿Cómo ha cambiado el festival en estos años?

Ahora somos más profesionales. Poseemos una amplia red de contactos y tratamos en con el ICAIC (Instituto de Arte e Industria Cinematográfica), productores independientes de Cuba, coproductores internacionales, escuelas de cine y festivales. Ello nos ha facilitado organizar giras para los invitados y dar a conocer el cine cubano en Alemania y alrededores. Queremos mencionar también a los directores, actores y guionistas, y los festivales internacionales de Innsbruck y Utrecht, con los que hemos colaborado estrechamente.

El año que viene el Festival cumplirá 20 años. ¿Qué retos tienen para el futuro?

Quisieramos encontrar más posibilidades de promover el cine cubano aquí. Queremos convertirnos en una plataforma fuerte que de a conocer el cine de la isla en Alemania.

¿Cómo afecta la situación cubana a la industria cinematográfica?

El ser un país sin recursos afecta notablemente a las posibilidades del ICAC. A veces los directores de cine tienen que esperar mucho hasta poder realizar un proyecto. Gracias a las nuevas tecnologías, los problemas económicos no son tan importantes. Esto consigue que el cine se desarrollé mas rápidamente y de forma más independiente. En estos momentos, los cineastas piden una ley de cine que garantice la legalidad de las producciones independientes. Los directores buscan constantemente la posibilidad de financiación extranjera. La coproducción influye positivamente en el contenido y la calidad de las películas. El complejo proceso de reformas actuales hace crecer ciertas contradicciones sociales que ya se ven reflejadas en el cine de los últimos años, por ejemplo en la película “Habanastation” de Ian Padrón. Se puede prever que esa temática tome un mayor espacio en los años próximos años.