Desde el año pasado se mantenían los rumores acerca de que la FIFA cambiaría la fecha de la Copa del Mundo de fútbol 2022. Los calores usuales durante la temporada estiva en Catar, que pueden llegar a entre 35 y 45 grados Celsius, prometían convertir el juego en un tormento para los jugadores. Pero el cambio de fecha, que debe resolver formalmente todavía el ejecutivo de la FIFA, no es una decisión fácil, por sus múltiples implicaciones.

Por ejemplo, Thomas Bach, el nuevo presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), había dicho en octubre que dudaba que el Mundial pudiese coincidir con los Juegos de Invierno de 2022 si el torneo de fútbol se trasladaba de su tradicional fecha de junio y julio.

El ex presidente del fútbol alean, Theo Zwanziger, relativizó las declaraciones de Valcke, diciendo que "todavía no hay una decisión formal de renunciar a la fecha estival, pero la tendencia parece clara".

Críticas a Catar

La concesión del Mundial del 2022 a Catar ha sido objeto de múltiples críticas. Igualmente se han denunciado abusos a los trabajadores de la construcción. Amnistía Internacional afirmó que los trabajadores inmigrantes son "tratados como ganado" y pidió a la FIFA que trabaje con las autoridades cataríes para acabar con tales abusos.

"La FIFA tiene la tarea de enviar un mensaje público contundente de que no tolerará abusos a los derechos humanos en los proyectos de construcción relacionados con el Mundial", señaló el secretario general de Amnistía, Salil Shetty.

ers (reuters, sid, dpa)