Rzeczpospolita, de Varsovia: “Guido Westerwelle no se dejó tumbar del caballo. ¿Cómo pudo lograr ese milagro? En su discurso en Stuttgart no hubo una sola palabra de autocrítica. El jefe del partido liberal alemán (FDP) indicó a sus miembros que los (malos) resultados de las encuestas no tenían ningún efecto en los ambiciosos planes de esa colectividad. Levantando la voz, Westerwelle advirtió que un fracaso del FDP llevará al gobierno a una ‘mayoría de izquierda’. Westerwelle no hizo un acto de contrición ni un intento de analizar las causas de la crisis de los liberales, sólo demostración de poder y llamados a confiar en la jefatura. Ese método puede ser bueno para una asamblea general. Pero si los resultados de las encuestas no mejoran, el rey Guido podría ser tumbado de su trono con doble estruendo. A no ser que tenga una fórmula mágica oculta.”

De críticos a criticones

Braunschweiger Zeitung, de Braunschweig: "Si el pionero liberal Ralf Dahrendorf hubiera escuchado el discurso de Westerwelle, se hubiera asustado. El jefe del partido liberal alemán no analizó la desoladora situación del partido ni atacó a sus críticos. ‘El comienzo está hecho’ es una frase de cajón con la que se ahoga cualquier crítica, sea sobre la reforma tributaria o sobre el sistema de salud. Retóricamente dicha frase es inteligente porque pone a los críticos como criticones. Guido Westerwelle no asume la responsabilidad que él mismo exige.”

Holanda: ¿Volverá a cooperar en Afganistán?

De Volkskrant, de Ámsterdam: “Desde que se retiró de Urusgan, Holanda no contribuye significativamente a la Misión de Afganistán (que sigue siendo respaldada por mandato de Naciones Unidas). Es comprensible que el Gobierno de La Haya quiera mejorar la cooperación. Primero, porque el objetivo estratégico de la misión de impedir que Afganistán se vuelva a convertir en una base de operaciones de los extremistas islamistas sigue siendo de vital importancia. Y segundo, porque regresar a la cooperación holandesa es una componente lógica de la política de relaciones exteriores en una alianza. Sobre todo cuando se trata del modesto papel que le corresponde a Holanda.”

China: el mercado tiene que ser vía doble

Ouest-France, de Rennes: "China no ha alcanzado el poder financiero de la Gran Bretaña del siglo XX, o el de los Estados Unidos en las últimas décadas. El fenómeno tampoco es necesariamente de una sola vía, si los europeos logran convertir la apertura de Pekín en un mercado de oportunidades para ambas partes. De todas formas, la velocidad con que China asciende es impresionante. En sólo tres años China ha multiplicado por diez sus inversiones en el exterior. Eso empero, sin retirar los obstáculos que las empresas no chinas tienen para establecerse en ese país.”

Autor: JOV

Editor: Pablo Kummetz