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No, la era de Angela Merkel aún no ha finalizado

José Ospina-Valencia
6 de febrero de 2021

En redes ronda una noticia sobre la despedida de la canciller alemana, Angela Merkel. Una noticia falsa, pues Merkel sigue al mando como canciller de Alemania. DW investigó la génesis de esta fake news.

La canciller alemana, Angela Merkel, en entrevista con la cadena privada RTL, este 4 de febrero de 2021.
La canciller alemana, Angela Merkel, en entrevista con la cadena privada RTL, este 4 de febrero de 2021. Imagen: Sandra Steins/Bundespresseamt/dpa/picture alliance

Angela Merkel es muy bien vista en América Latina. ¿Se intentó ganar réditos con la publicación de una noticia inventada y falsa sobre la canciller alemana?  ¿O fue el error de un periodista novato que malentendió la elección de un nuevo presidente de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) como la despedida de Angela Merkel como canciller?

Todo parece haber comenzado con una cadena de WhatsApp sin fecha, plagada de errores ortográficos y bondadosas mentiras titulada "Alemania se despidió de Merkel con seis minutos de calurosos aplausos" que fue reenviada incontables veces. Este falso mensaje sirvió de base a redacciones como el portal mexicano "La Silla Rota" que la publicó el 26 de enero.

Noticia con título falso y otros datos correctos. Imagen: lasillarota.com

Dos días más tarde, el "Diario de Cuba", comenta en base a la noticia falsa, que se trató de "un duro golpe para los alemanes" con enlace desde su artículo al diario mexicano. El mismo 28 de enero, el diario argentino "El confidencial" la retoma diciendo que "lo sorprendente fue ver al pueblo alemán despedirla: las personas salieron a los balcones de las casas y la aplaudieron espontáneamente durante 6 minutos". Las mismas palabras fueron tomadas como un hecho veraz por comentaristas online en España y México.

Angela Merkel no se fue - no aún - y nadie salió a despedirla a ningún balcón. DW intentó contactar a diversos comentaristas que, sin cotejar la información, ayudaron a alargar interminablemente esta falsa noticia. Pero ninguno de ellos reaccionó.

La credibilidad en peligro

En Colombia, "sin bien los medios tradicionales no replicaron esta noticia falsa, varios influenciadores y políticos sí la compartieron en Twitter repitiendo que la canciller alemana se había ido en medio de una salva de aplausos y agregando supuestas respuestas de ella sobre su vestuario", cuenta a DW Rafael Quintero, editor de la Unidad de Periodismo de Datos de El Tiempo, el mayor diario de Colombia.

Noticia falsa con cita a otro medio y algunos datos correctosImagen: diariodecuba.com

"Al parecer, ningún medio serio se dejó llevar por la inmediatez de esta información falsa", analiza Quintero y reconoce que "esto no quiere decir que los serios no caigan en imprecisiones, porque las noticias falsas también son tendencias cíclicas que cuando reaparecen pueden hacer caer a los que no habían caído antes".

Siempre existe el riesgo de publicar una noticia falsa, sobre todo en redacciones digitales. "Por ello nuestra redacción aplica siempre un 'freno de mano' en noticias de la envergadura como la de Angela Merkel", explica Quintero, agregando que "como en todas las redacciones serias, se realiza primero una verificación básica que consiste en corroborar si la noticia la llevan agencias o medios internacionales renombrados". Si no la llevan es porque algo no cuadra.

"El siguiente paso es llamar al/la corresponsal para corroborar la información", explica el verificador de El Tiempo y advierte que "si no tenemos certeza, la orden es esperar y no publicar, así otros lo hagan", porque "es preferible salir un poco más tarde que dañar la credibilidad, que es mucho más difícil de recuperar".

¿Cómo evitar cometer errores en medio de la guerra mediática por la inmediatez? "Haciendo pedagogía con los periodistas, sobre todo en la redacción digital. Por eso aquí vale: primero, freno de mano, luego consulta y corroboración", responde Rafael Quintero.

Cazando "bulos"

En España, la Fundación Maldita.es se creó exclusivamente para “cazar bulos", o sea mentiras que buscan perjudicar a alguien. "Nos dedicamos a luchar contra la desinformación, haciendo verificación del discurso público y alfabetización digital", dice a DW Carlos Hernández-Echevarría, coordinador de políticas públicas de Maldita.es, según la misma, "el verificador independiente número uno de España y el más visitado de la Unión Europea".

El proyecto empezó confrontando a los políticos con sus propias declaraciones en el pasado y lo que ahora defienden. Los verificadores construyeron un archivo con las frases que los políticos preferirían que fuesen olvidadas. "Maldita.es ha formado una amplia comunidad que nos ayuda a encontrar y verificar noticias, frases y cifras falsas". La idea es reducir cada vez más el tamaño de la portería para que no nos metan goles.

¿Quiénes y por qué difunden noticias falsas?

“Hay tres tipos", según Hernández-Echevarría. "En primera medida, están los que esperan ganar dinero con clicks y publicidad. En otra categoría, están los que esperan que un bulo les represente beneficio político o ideológico, y luego están los que solo quieren burlarse o fastidiar", enumera. En el caso de la difusión del bulo sobre Merkel pudo ser seguramente alguien que pensó que podía inventarse algo sobre una persona que admira, agrega, pero "una noticia falsa, por bien intencionada que sea, sigue siendo una noticia falsa", en esto también concuerdan los verificadores a ambos lados del Atlántico.

"La democracia depende de la veracidad, de la calidad de la información que un votante obtiene antes de emitir su voto", recuerda el experto de Maldita.es sobre los riesgos de la difusión de noticias falsas, y pone el ejemplo de políticos que crean con cifras o hechos falsos una realidad que no existe para manipular a los electores en contra de la presunta amenaza que representarían los inmigrantes, el capitalismo o el socialismo.

La importancia de verificar la información

El problema, explica, por su parte Rafael Quintero, editor de la Unidad de Periodismo de Datos de El Tiempo, es que algunos líderes políticos publican noticias falsas, no solo por error de buena fe, como en el caso de una concejala de Bogotá que reenvió la falsa noticia sobre Merkel. "En Colombia, líderes de ultraizquierda y ultraderecha retuitean mentiras evidentes; con ello buscan potenciar su discurso extremo de cualquiera de las dos orillas", lamenta. La conclusión del verificador colombiano es contundente: "Hay quienes difunden una noticia falsa para tener razón a todo precio".

Pero aun cuando haya quien manipule la información, el lector, el televidente, el escucha o el usuario con celular en mano no está inerme y posee la mejor herramienta contra las noticias falsas: la sana duda y el freno de mano. "El ciudadano debe dudar de las noticias, los audios, las imágenes que recibe y nunca reenviarlos antes de estar seguro, así los envíen familiares o amigos queridos", recomiendan ambos expertos.

Otro de los aspectos clave de la desinformación es que una vez verificada su falsedad, regrese a los mismos canales como información rectificada. Maldita.es busca por ello, "que el desmentido sea tan viral con el bulo". Quintero le apunta a la educación y prevención de noticias falsas, "porque a muchos políticos y funcionarios, así se les demuestre que mintieron, rara vez se disculpan". Para Hernández-Echevarría, la rectificación "es una batalla, porque el desmentido no causa tanto impacto como la mentira".

A propósito, Angela Merkel no se ha ido. Cierto es que no presentará una quinta candidatura a la cancillería de Alemania en las próximas elecciones generales el 26 de septiembre de 2021. Por lo menos, así lo aseguró el 6 de junio de 2020 en la segunda cadena de la televisión pública ZDF cuando afirmó: "¡No. De verdad que no!".

(er)

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