Nobel de Literatura 2011: el sueco Tomas Tranströmer
6 de octubre de 2011El flamante premio Nobel de Literatura, el sueco Tomas Tranströmer, no ha podido hacer grandes declaraciones: una hemiplejia sufrida en 1990 afectó su capacidad de hablar. Con todo, su esposa, Monica Bladh-Tranströmer, lo describe como “increíblemente feliz e impresionado".
Al parecer, como muchos de los galardonados anteriores, ya no esperaba el premio; pero Tranströmer menos que los otros por ser sueco. Eran muchos los que pensaban en Estocolmo que el jurado de la Academia nunca entregaría el Nobel de Literatura a Tomas Tranströmer, candidato desde 1993.
Desde hacía 40 años, el galardón sueco no se quedaba en casa. A más tardar a partir del tan criticado doble premio Nobel a los suecos Harry martinson y Eyvind Johnson en 1974, la Academia se ha cuidado mucho de no volver a pasar por nacionalista. De no ser sueco, así el presidente del jurado Peter Englund, “Tranströmer habría recibido hace tiempo el premio”, pues el valor poético de su obra es indiscutible.
Sicólogo, literato, poeta
Tranströmer nació en Estocolmo en 1931, hijo de un periodista y una maestra. Aunque ya en la adolescencia detectó su vocación, su debut literario tuvo lugar a los 23 años, en 1954, con el poemario 17 dikter, 17 poemas. Sicólogo, historiador y literato de formación, Tranströmer trabajó mucho tiempo en un reformatorio, con jóvenes problemáticos.
La hemiplejia no impidió que en 1993 publicara Minnera ser mig, “Visión de la memoria”, que escribió gracias a la ayuda de su mujer. El que sólo pueda usar la mano izquierda tampoco ha impedido que el poeta se haya dedicado los últimos 20 años a tocar el piano.
Publicaciones
En 2006 salió a la luz una versión revisada con motivo de su 75 cumpleaños, y entre tanto ha publicado también varios poemarios, la mayoría siguiendo la métrica minimalista japonesa del haiku. La economía del lenguaje marca su poesía. "Es un místico, un poeta que ha viso el cero, el punto vacío en el centro sin el cual no hay nada", decía el escritor Lars Dichter cuando el flamante premio Nobel cumplió 80 años. Muy activo y leído en la década de los 1960, el poeta cayó después en el olvido, hasta que en la década de los 1980 los críticos lo resdescubrieron y el gran público empezó a quererlo. “El poeta que todos aman”: así lo denominó el diario sueco Aftonbladet.
La obra de Tranströmer ha sido traducida a unos 50 idiomas, desde el árabe al vietnamita. Al español se ha traducido “Postales negras”, “El bosque en otoño”, “Góndola fúnebre” y la antología “El cielo a medio hacer”.
Autora: mb/dpa/afp/dlr
Editora: Emilia Rojas