El “hombre fuerte” del Kremlin, Vladimir Putin, presentó armas de largo alcance, con potencial nuclear y presuntamente imposibles de interceptar, sin dejar del todo claro para qué las usará políticamente a largo plazo.
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Este jueves (1.3.2018), con un apasionado discurso de dos horas sobre el estado de la nación, el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, trajo a la memoria los momentos más tensos de la Guerra Fría: ante las dos cámaras del Parlamento y la mirada atenta del resto del mundo, presentó el nuevo arsenal estratégico de su país, desde misiles intercontinentales hasta cohetes hipersónicos. "Antes de que tuviéramos este armamento en nuestras manos, nadie nos escuchaba. ¡Escúchennos ahora!”, dijo el "hombre fuerte” del Kremlin, explayándose en descripciones técnicas que parecían tomadas de una película de ciencia ficción.
Elecciones inminentes
Por un lado estaba el proyectil autopropulsado de más de 200 toneladas Sarmat, clasificado por la OTAN como el misil SS-X-30 Satan 2, un arma de alcance "prácticamente ilimitado”; "la respuesta” a la decisión unilateral de Washington de abandonar el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START), según Putin. Por otra parte estaban un "dron submarino”, un misil impulsado por energía atómica y el misil hipersónico Kinzahl –"Puñal”, en ruso–, apto para el transporte de ojivas nucleares. El mandatario ruso enfatizó que estas armas son indetectables por los sistemas antimisiles colocados por Estados Unidos en su territorio y en Europa del Este.
Es probable que esta presentación tenga menos que ver con la salida de Estados Unidos del START –decidida en 2002– que con un anuncio reciente de Donald Trump –quien quiere fabricar "pequeñas” armas atómicas para defenderse de presuntas amenazas externas– y con la inminencia de los comicios presidenciales rusos: Putin aspira a la reelección en apenas dos semanas (18.3.2018). Cabe agregar, eso sí, que la nueva panoplia del Kremlin combina perfectamente con el robustecimiento de la política exterior del gigante eurasiático: Putin se impuso en Siria y, con ayuda de Irán, ha incrementado su grado de influencia en el Cercano y Medio Oriente.
"Intereses legítimos” de Rusia
Las embestidas de Rusia en Ucrania hicieron que la Unión Europea y la OTAN frenaran su proyecto de expansión hacia el este. Y tanto en África como en Asia Oriental y América Latina, Moscú ha hecho sentir su presencia. Stefan Meister, de la Sociedad Alemana para la Política Exterior (DGAP) sostiene que hay indicios del éxito de las estrategias aplicadas por el Kremlin hasta ahora. "Rusia ha sido reconocida por Washington como un actor imposible de ignorar en conflictos internacionales. Ha sido aceptada la limitada soberanía de sus vecinos postsoviéticos y, en consecuencia, han sido aceptadas también las zonas de influencia rusa”, dice el experto.
"Además, la política de democratización ‘occidental' en la periferia rusa y el resto del mundo llegó a su fin”, acota Meister. Eso es preocupante porque el empleo de tácticas de desestabilización con objetivos claros y la reivindicación de "intereses legítimos” por parte del Kremlin se han convertido en dos instrumentos centrales de la política exterior de Putin. El exdiplomático ruso Vladimir Frolow explicaba en el diario suizo Neue Zürcher Zeitung que las herramientas jurídicas son usadas recurrentemente por Moscú para ampliar su zona de poder: hoy es Crimea un "interés legítimo” de Rusia; mañana pueden serlo el Donbás y el sureste ucraniano.
Este año es Siria un "interés legítimo” de Putin; en los próximos no se puede descartar que pudieran legar a serlo Libia, los Balcanes, Afganistán, Nicaragua y hasta Venezuela.
Kersten Knipp (ERC/ERS)
Una "misa" para rendir culto a las armas
La mayoría de las religiones tiende a predicar el amor y la paz; pero ese mensaje suele ser malinterpretado con frecuencia. Como muestra, una misa celebrada en Estados Unidos a la que se asiste armado hasta los dientes.
Imagen: Reuters/E. Munoz
¡Bendito seas, AR-15!
El fusil de salto semiautomático AR-15 es el arma predilecta de los estadounidenses. Fue con esa arma larga que se perpetró la matanza en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, Florida, el 14 de febrero de 2018. Esa es también el arma que más feligreses llevaron a la extraña misa celebrada el 28 de febrero en Newfoundland, Pensilvania (en la imagen, en una versión dorada).
Imagen: Reuters/E. Munoz
Con municiones por corona
A los feligreses se les pidió que asistieran a la misa con una corona; algunas de ellas fueron hechas a base de municiones. Esa ceremonia religiosa fue organizada por un hijo del difunto Sun Myung Moon, el coreano que emigró a EE. UU. y fundó la Asociación del Espíritu Santo para la Unificación del Cristianismo Mundial –más conocida como la secta Moon–, tras autoproclamarse mesías.
Imagen: Reuters/E. Munoz
Tras los pasos de su padre
Originalmente, se suponía que Moon Hyung-jin (coronado, en el lado derecho de la foto) debía asumir el liderazgo de la secta Moon tras la muerte de su padre, en 2012. Pero una rencilla con su madre lo llevó a fundar su propia iglesia. En esta imagen, él bendice a parejas casadas ...y a sus armas.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
¿Derecho divino?
La iglesia le pidió a sus feligreses que llevaran sus armas a la misa como prueba de que creían en el derecho a poseer armas y estaban dispuestos a defenderlo. En su sermón, Moon Hyung-jin alegó que la posesión de armas era un derecho otorgado por dios. Esta ceremonia, que llamó la atención de la prensa, reveló hasta qué punto un segmento de la población estadounidense venera sus arsenales.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
Precauciones de rigor
Las armas traídas a la misa por las alrededor de 250 parejas invitadas fueron inspeccionadas en la entrada de la iglesia para confirmar que estuvieran descargadas. Además, el cargador de las mismas fue sellado para evitar que a alguien se le ocurriera la idea de consumar una masacre en el templo.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
Una clara jerarquía
En la ceremonia religiosa se hizo evidente una clara jerarquía: los puestos delanteros estaban reservados para quienes poseían ametralladoras, fusiles de asalto o metralletas y los asientos traseros, para los dueños de revólveres y otras armas con menor poder de fuego. Los fotógrafos y camarógrafos sólo tuvieron permitido estar de pie al final de la sala.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
¿Riesgo reducido?
Al parecer, cuando los entusiastas de las armas se reúnen, el resto de sus conciudadanos corre menos peligro. Un estudio realizado por científicos estadounidenses revela que, durante el encuentro anual de la NRA, la asociación de los lobbyistas de las armas de fuego en EE. UU., el número de heridos desciende en un 20 por ciento; ese efecto empieza unos días antes y termina varios días después.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Larma
“¡Ya basta!”
En EE. UU. hay 300 millones de armas de fuego en circulación y éstas causan 30.000 muertes cada año. Pero también está creciendo el número de personas que protestan airadamente contra la laxitud de las leyes que regulan la posesión y el porte de armas. Tras la matanza de Florida, ha aumentado la cantidad de jóvenes que se han unido a la causa de exigir controles más severos.