"Estoy al servicio del pueblo sirio", señaló Brahimi, sin precisar cuándo viajará a Damasco y limitándose a decir que lo hará "en algunos días". Brahimi se reunió con el secretario general de la Liga Árabe, Nabil Al Arabi, y luego sostuvo un encuentro con el presidente egipcio, Mohamed Mursi.

La oficina de Mursi anunció un primer encuentro del nuevo grupo de contacto para Siria para la próxima semana, probablemente a nivel de ministros del Exterior. Al grupo pertenecen Egipto, Irán, Turquía y Arabia Saudí. Posiblemente acudirá también un representante de Francia. Según informaciones del aeropuerto de El Cairo, ya llegaron delegaciones de Turquía e Irán para preparar el encuentro. El viceministro de Exteriores saudí, el príncipe Abdulaziz bin Abdullah al Saud, viajará el miércoles a la capital egipcia.

En una cumbre en La Meca el pasado agosto, Mursi abogó por una solución regional del conflicto sin intervención militar.

Ban pide perseguir crímenes de guerra

Mientras, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon reclamó a la comunidad internacional que persiga con la ley todos los crímenes de guerra cometidos en Siria. "Debemos asegurar que cualquiera que cometa crímenes de guerra y contra la humanidad y viole los derechos humanos será llevado ante la Justicia", reclamó Ban durante la apertura de la sesión general del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.

Ban se mostró profundamente preocupado por los constantes ataques aéreos de las fuerzas de Al Assad contra civiles, así como por el aumento de la violencia entre los representantes de diferentes grupos religiosos y el empeoramiento de la situación humanitaria. El secretario general de la ONU lamentó además que ambas partes hayan optado por “una solución a través de la violencia en lugar del diálogo", algo que dificulta los esfuerzos por lograr la paz.

Ban reclamó también a todos los implicados que apoyen los esfuerzos del nuevo enviado especial a Siria, Brahimi, y lamentó que el Consejo de Seguridad de la ONU siga estando dividido respecto a la forma de responder al conflicto sirio. Además destacó la importancia de que tanto el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra como la Asamblea General en Nueva York sigan trabajando por una solución del conflicto.

Pillay condena violencia de ambas partes

Al igual que otros ponentes, la Alta Comisaria de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, condenó la violencia en Siria y dijo que además de los crímenes de las tropas del gobierno contra civiles, también preocupan cada vez más las violaciones a los derechos humanos por parte de la oposición, que incluyen "asesinato, ejecuciones arbitrarias y torturas, así como en los últimos tiempos un creciente uso de los ataques con explosivos".

Pillay criticó también durante la sesión violaciones a los derechos humanos en otros países, como Bahrein, donde cuestionó la encarcelación de opositores tras arrancar "confesiones bajo tortura", o en los territorios palestinos ocupados, así como ataques a los refugiados de Costa de Marfil, o combates en el este de Congo. También criticó el cierre de un campamento de la etnia roma en Francia y ataques a inmigrantes en Grecia.

Fuente: dpa

Editora: Emilia Rojas