Un operador de inversiones del gigante banco suizo UBS ha provocado pérdidas que rondan los 1.500 millones de euros; se trata de negocios no autorizados. "Es posible que debido a esa operación UBS registre pérdidas en el tercer trimestre de 2011", señala un comunicado del banco, en el cual se  anuncia una  investigación. Más detalles aún no se conocen. 

UBS afronta tiempos difíciles. Entre 2007 y 2008 registró pérdidas de casi 28.000  millones de francos y tuvo que ser rescatado por el Estado. Ahora, aunque el banco intenta tranquilizar a los clientes y asegura que sus fondos no están afectados, los primeros pronósticos del efecto que tendrá este nuevo negocio especulativo prevén pérdidas para el trimestre. El golpe se reflejó inmediatamente de manera negativa en sus acciones.

Como hace tres años

El caso ocupa titulares en la prensa europea. Se subraya su parecido con el caso del francés Jerôme Kerviel, entonces de 31 años, quien en enero de 2008, por transacciones especulativas no autorizadas causó a la francesa Société Générale pérdidas por un monto de 4900 millones de euros. El banco francés, el segundo más grande del país, estuvo al borde de la quiebra. Kerviel fue sentenciado hace algunos meses a tres años de cárcel por falsificación, deslealtad y manipulación dolosa. Y aunque el intrépido agente actuó solo con la ayuda de un asistente, a sus superiores se les imputa falta de control.

¿No íbamos a tener mayor control?

Curiosamente, justo al cumplirse los tres años del anuncio de la insolvencia del banco Lehman Brothers –que inició la crisis financiera y económica mundial-, la policía londinense anunció haber detenido al sospechoso de haber causado la actual debacle del banco suizo. El hombre, de 31 años, será investigado por “fraude y abuso de poder”.

Según el diario alemán Berliner Morgenpost, el UBS –que en 2007 y 2008 tuvo que echar mano a ayuda estatal para salvarse de la bancarrota- intenta convencer a público y empleados de que “la lamentable noticia no mermará la fuerza de la empresa”. Con todo, a pesar de los efectos económicos que vaya a tener, según análisis de la prensa, la reputación de la institución financiera se verá sin duda afectada. La institución se encontraba justo en fase de recuperación de la crisis de las hipotecas tóxicas, tras la cual se hicieron grandes promesas de mayores controles en los mercados financieros.

Autora: Mirra Banchón (bmp/dpa/rtr/efe)
Editora: Emilia Rojas