En su primer mensaje público desde que asumió el liderazgo entre las filas de los talibanes, el nuevo jefe de ese grupo radical, Ajtar Mohamed Mansur, llamó a sus filas a la unidad, luego de que proliferasen conjeturas sobre posibles divisiones internas debido a que ciertos grupos, aparentemente, eran renuentes a aceptarlo como sucesor del carismático mulá Omar, fundador del movimiento y presuntamente fallecido en 2013, pese a que su deceso recién fue anunciado por el gobierno afgano el miércoles.

Mansur lamentó, mediante un mensaje de audio difundido en Kabul, la muerte de su predecesor y aseguró que se esforzará por seguir su camino. También advirtió de los intentos por dividir al grupo, al tiempo que pidió a sus miembros que sean “honestos unos con otros” y se hagan “amigos” hasta que se logre un “sistema islámico”. “Alá nos ha ordenado mantener la unidad. Si hay desunión, Alá estará insatisfecho y nuestro enemigo estará contento”, indicó Mansur.

El mensaje fue dado a conocer por el portavoz talibán Zabihullah Mujahid. Otro punto de conflicto interno serán las negociaciones de paz adoptadas por los talibanes y el gobierno afgano. En su discurso, Mansur se refirió al tema, aunque sin dejar clara su postura al respecto. “Continuaremos la yihad hasta que se establezca el régimen islámico”, dijo el líder, que llamó a sus seguidores a “practicar el islam y estar preparados para hacer sacrificios”.

Discrepancias internas

El gobierno afgano anunció el miércoles 29 de julio el fallecimiento del mulá Omar en un hospital de Karachi (sur de Pakistán) en abril de 2013 y los talibanes lo confirmaron al día siguiente, aunque aseguraron que ocurrió en Afganistán y no proporcionaron una fecha. Tras la elección de Mansur, que era el número 2 de la formación insurgente y trabajaba como jefe militar, casi todos los restantes líderes talibanes le prometieron “lealtad” como nuevo Amir-ul Momineen (Príncipe de los Creyentes).

El viernes, comandantes talibanes que asistieron a la reunión en que eligieron a Mansur como sucesor de Omar dijeron a la agencia Reuters que el hijo y el hermano de Omar habían abandonado el encuentro, en protesta por la decisión. Otros comandantes se han aliado al Estado Islámico y será ahora tarea de Mansur alinear a los talibanes para seguir adelante con el proceso de paz. El nuevo dirigente también dio una señal al indicar que “en el nombre de la yihad, la matanza de personas inocentes no es islámica. Necesitamos ganar los corazones de la gente y entonces podremos gobernarlos”.

DZC (EFE, Reuters, dpa)