Obama afirmó que logró acordar con los líderes en el Congreso un aumento del marco crediticio y un plan para una reducción de deuda a largo plazo.

Este lunes, el Senado y la Cámara de Representantes realizarán las votaciones necesarias. La declaración del presidente en conferencia de prensa en Washington se produjo poco antes de la apertura de los mercados asiáticos.

Mientras, los líderes de cada partido informan a sus correligionarios sobre los detalles del acuerdo. Los analistas creen probable que haya resistencias por parte de los republicanos más conservadores y también de algunos demócratas en la Cámara de Representantes. Según informes de los medios, hasta 100 demócratas podrían rechazar el compromiso en la Cámara Baja porque a largo plazo puede llevar a reducciones en servicios de salud y pensiones.

De todas formas, los expertos se dijeron convencidos de que el acuerdo será aprobado finalmente por las dos cámaras.

Previamente se habían filtrado a la prensa algunos puntos del acuerdo, que permite elevar el techo de deuda, sin lo cual Estados Unidos habría estado en riesgo de caer en la cesación de pagos después del 2 de agosto por primera vez en su historia.

Aumento de límite de deuda en dos etapas

El actual techo de la deuda nacional era de 14,3 billones de dólares. El aumento del límite de deuda en 2,4 billones en dos etapas será suficiente para que el gobierno pueda cumplir con sus obligaciones pasadas las elecciones de noviembre de 2012, lo cual era una demanda clave de Obama.

El presidente dijo que el acuerdo "permitirá evitar la cesación de pagos y poner fin a la crisis que Washington impuso al resto de Estados Unidos", aunque reconoció que no era perfecto.

El acuerdo fue resultado de conversaciones de último minuto entre los demócratas de Obama, que cuentan con la mayoría en el Senado, y los republicanos opositores, que controlan la Cámara de Representantes.

"Los líderes de los dos partidos en las dos cámaras alcanzaron un acuerdo que reducirá el déficit y evitará la cesación de pagos, una cesación de pagos que habría tenido efectos devastadores en nuestra economía", dijo Obama.

Los republicanos, presionados por su ala más conservadora, el "Tea Party", pedían profundos recortes en los gastos federales antes de acordar un permiso para adquirir más préstamos que engrosen la deuda nacional. "Este proceso ha sido accidentado", dijo Obama. "Llevó demasiado tiempo".

El presidente aclaró que los primeros recortes en el presupuesto serán de un billón de dólares en los próximos diez años. Los recortes propuestos "no sucederán de forma tan abrupta como para ser una carga para una economía frágil".

Reducciones automáticas

En una segunda etapa se prevén recortes por otros 1,5 billones para 2021. Para ello, se conformará una comisión parlamentaria que decidirá cómo se aplicarán estos recortes. Probablemente haya recortes en la red social y una nueva reforma impositiva.

En relación con ello, Obama volvió a poner sobre la mesa aumentos de impuestos para los más ricos. El presidente subrayó que también esta parte de la población debía hacer su aporte. Los republicanos, que rechazaron hasta ahora de forma vehemente los aumentos de impuestos, habían indicado previamente que este punto no estaba incluido en el acuerdo. Obama, en cambio, dijo por la noche: "Todas las opciones estarán sobre la mesa".

En caso de que el Congreso no apruebe el segundo paquete de medidas de ahorro hasta fines de diciembre, habrá reducciones automáticas en todos los ámbitos, incluidos la defensa y los programas sociales.

De acuerdo con CNN, el Senado podría votar ya el lunes al mediodía (hora local) el acuerdo. Luego, el borrador será votado en la Cámara de Representantes. Teóricamente, de esta forma sería posible que las medidas estén aprobadas por las dos cámaras para el lunes por la noche, de modo que Obama pueda firmar la ley.

dpa