El Comité de Planificación y Construcción del Ayuntamiento de Jerusalén tiene previsto reunirse mañana para dar luz verde a los proyectos de Givat Shaked y el E1, dos nuevas colonias judías en la mitad este de la urbe, destinada a ser la capital de un futuro Estado palestino, pero ocupada por Israel en 1967 y anexionada en 1980.

La Comisión de Colonización y Resistencia al Muro de la OLP denunció hoy en un comunicado los planes de expandir la presencia de colonos en el este de Jerusalén, que suponen 3.412 nuevas viviendas en una extensión de más de 200.000 metros cuadrados, muy cerca del barrio palestino de Beit Safafa.

El portavoz de esa comisión de la OLP, Muayyad Shaaban, denunció que la ejecución de esos planes obligará a la "desplazamiento forzoso" de más de 2.000 nativos de las comunidades beduinas de Jabal al-Baba, Wadi al-Jamal, Bir al-Maskoub, Wadi Snisil y Abu George, lo que equivale a "un crimen de guerra".

"Grave violación" de lo pactado en acuerdos de paz

"Los dos planes unirán todos los asentamientos de la zona oriental fuera de los límites de la ciudad, con los asentamientos de dentro de los límites municipales, transformando así las aldeas palestinas en esos enclaves asediados por colonias para consolidar el denominado 'Gran Jerusalén' y forzando un giro demográfico en el área en favor de la población colona", indicó Shaaban, citado por la agencia oficial palestina Wafa.

Shaaban insistió en que estos planes son "una grave violación" de lo pactado en acuerdos de paz, al separar Jerusalén este del resto de Cisjordania ocupada, lo que "asestará un golpe fatal a la solución de los dos Estados".

"Se deben tomar medidas de inmediato para detener los esfuerzos para avanzar en los planes Givat Shaked y E1 debido a sus graves ramificaciones en los derechos de los palestinos y la viabilidad de un futuro estado palestino contiguo con una capital en Jerusalén Este", alertó también la ONG israelí IrAmin, que supervisa la construcción de asentamientos en la parte oriental de la ciudad. 

jov (efe, wafa)