Ordenan abrir más puestos para prensa en juicio contra neonazis
12 de abril de 2013 El juicio contra Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU por sus siglas en alemán) había generado polémica no solo por sus implicancias, sino también porque el tribunal de Múnich que verá el caso no acreditó a ningún medio de comunicación turco, lo que generó toda clase de reclamos que, originalmente, no fueron oídos por el tribunal regional.
El caso es el juicio de Beate Zschäpe, de 38 años, y cuatro sujetos más, a los que se acusa, entre otras cosas, de complicidad en el asesinato de diez personas: una policía alemana, un ciudadano de origen griego y ocho personas de origen turco. De ahí la importancia de tener medios de prensa de ese país presentes en la sala.
Pero al momento de entregar las 50 acreditaciones, prácticamente había solo medios alemanes. Por eso el diario Sabah presentó un recurso que fue acogido por el Tribunal Constitucional Federal de Karlsruhe, que ordenó que se otorgue "un número razonable de asientos a la prensa extranjera, en especial a los relacionados con las víctimas de los delitos". El tribunal basó su decisión en el hecho de que se violaron los principios de igualdad de los medios.
Recuperar la confianza
Para cumplir con esa instrucción, puede crearse un número adicional de puestos, al menos tres, y asignarlos de acuerdo a un principio de prioridad o al azar. Incluso podría buscarse alguna otra fórmula, aunque el tribunal no aceptó la solicitud de Sabah de considerar inválido todo el proceso de acreditación.
Esto, porque el redactor jefe del diario, Ismail Erel, recibió el mail de las acreditaciones casi 20 minutos más tarde que los otros medios. “El tribunal ha dado un mensaje muy claro", dijo Erel tras conocer la decisión. El abogado de Sabah, Ralf Höcker, dijo que "la asignación de los puestos debe ser justa y esto implica que los medios de comunicación extranjeros deben encontrar un lugar en el proceso".
Políticos de todas las tendencias aplaudieron la decisión. El vicecanciller de Alemania, Philipp Rösler (FDP), mostró su satisfacción por el hecho de que "ahora los medios de comunicación turcos puedan informar sobre el proceso". Mientras, la comisario Federal de Integración, Maria Böhmer (CDU), aseguró que esto permitirá a los migrantes recuperar la confianza en el estado de derecho.
El proceso se iniciará el miércoles 17 de abril en Múnich, cuyo Tribunal Superior había repartido los asientos de prensa por orden de llegada y no aceptó hacer cambios posteriores, algo que ahora está obligado a realizar.
DZC (Tageschau, Spiegel)