El tribunal que lleva adelante el juicio por el hundimiento en 2012 del crucero "Costa Concordia" frente a la isla de Giglio, en Italia, ordenó un peritaje adicional sobre los instrumentos de la embarcación. De esta forma, los jueces accedieron a los pedidos de otros demandantes y de los abogados del capitán Francesco Schettino, que creen que de esa forma pueden eximir de ciertas responsabilidades a su cliente. Schettino está acusado de homicidio involuntario, lesiones corporales y de abandono del barco. Los peritos analizarán los restos de la embarcación apenas estén disponibles. El proceso continuará el 7 de octubre con los testimonios de los primeros testigos. Las demás fechas previstas para esta semana fueron canceladas. El "Costa Concordia" chocó en enero de 2012 con rocas frente a la isla de Giglio y se hundió parcialmente, lo que causó la muerte de 32 personas. El capitán es el único acusado en el juicio, ya que otros cuatro miembros de la tripulación y un ejecutivo de la empresa naviera Costa Crociere, a la que pertenece el "Costa Concordia", aceptaron penas de entre 18 y 34 meses de prisión en suspenso en un acuerdo pactado con la fiscalía para no tener que ir a juicio. Costa Crociere fue condenado a pagar una multa de un millón de euros (1,35 millones de dólares). Schettino deberá volver a presentarse ante el tribunal el lunes. En tanto, continuó hoy la búsqueda de las dos víctimas del accidente que siguen desaparecidas, un tripulante indio y una pasajera de Sicilia. Desde la semana pasada, cuando la embarcación, que estaba parcialmente hundida, fue enderezada sobre la superficie, aumentaron las chances de encontrarlos. DPA