Oscar Pistorius contra el profesor de Colonia
16 de enero de 2008Se llama Gert-Peter Brüggemann y trabaja para el Instituto Biomecánico de la Universidad de Colonia. Su estudio es el que ha concluido que Oscar Pistorius no corre más rápido que los demás gracias a su prótesis “cheetah”, pero sí lo hace consumiendo menos energía. En concreto, Brüggemann asegura en sus conclusiones que las zancadas artificiales de Pistorius rinden gracias a la mecánica un 30% más que las convencionales piernas de un atleta.
"El Consejo de la IAAF [la Asociación de Federaciones Internacionales de Atletismo] pudo revisar todo el informe y ha decidido que las prótesis conocidas como 'cheetah' (guepardos) deberían ser consideradas una ayuda técnica que contraviene claramente la norma 144.2 del reglamento de [esta institución]", comunicó el organismo. "Por consiguiente, Oscar Pistorius no puede ser seleccionado para competir en competiciones organizadas bajo las normas de la IAAF".
El artículo citado proscribe el "uso de todo tipo de aparato técnico que incorpore muelles, ruedas o cualquier otro elemento que proporcione al usuario una ventaja sobre otro atleta que no use el aparato".
Un sueño roto
Cuando tenía 11 meses, al sudafricano Oscar Pistorius le fueron amputadas ambas articulaciones inferiores de rodilla para abajo. Medallista de oro en 200 metros en los Parlímpicos de Atenas y recordman mundial en la categoría de 100, 200 y 400, Pistorius se define a sí mismo como “el más rápido sobre ninguna pierna”.
En su país, el sudafricano ya compite con atletas no disminuidos. "Su sueño es que se le designe olímpico algún día", declaraba su representante, Peet van Zyl, y el estudio de Brüggemann no le acerca a este objetivo. Por eso, incluso antes ya de que se diera a conocer la decisión de la IAAF, Pistorius anunció que estaba dispuesto a “luchar hasta el final” para poder participar en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, donde esperaba correr para Sudáfrica en el relevo, no paralímpico, 4x400.
"Esperamos poder efectuar otra vez las pruebas en un ámbito independiente", dijo el atleta. Es decir, lejos de Brüggemann y su equipo, al otro lado del Atlántico. "Entregamos los resultados del estudio a algunos profesores de biomecánica en Estados Unidos y ellos no creen que tenga ventaja alguna".
Pocas variables
Pistorius es optimista. "Estoy seguro de que toda la cuestión quedará resuelta en los próximos meses", aseguró el velocista, que criticó el estudio de Brüggemann: “las pruebas llevadas a cabo hasta ahora fueron muy profesionales, pero algunos expertos consideran que no lo suficientemente amplias”.
En una carta a la IAAF, el sudafricano explicaba al organismo su disconformidad con los procedimientos del profesor alemán: "consideró muy pocas de las variables que se necesitan examinar para tomar una decisión de esta magnitud", escribía el atleta. Mientras tanto, la Confederación Deportiva Sudafricana y el Comité Olímpico de este país aceptaron la decisión de las autoridades del atletismo. "Si las normas dicen que tiene una ventaja injusta, entonces es una ventaja injusta ", dijo el vicepresidente del Comité, Mark Alexander.
Ahora, "la carga de demostrar lo contrario pesa sobre nosotros", declaró van Zyl. "No cederé", advirtió Pistorius.