Osetia del Sur, la república que reconoce a Maduro
José Ospina-Valencia
10 de enero de 2019
"Tú me reconoces, yo te reconozco" parece ser el lema de Venezuela y Osetia del Sur, uno de los países exóticos que asistió a la posesión del segundo mandato de Maduro, solo reconocido por pocos Estados democráticos.
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Además de Evo Morales, acudieron a la investidura de Maduro los mandatarios de Nicaragua, Daniel Ortega; Cuba, Miguel Díaz-Canel; El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; Osetia del Sur, Anatoli Bibílov; y Abjasia, Raul Jadyimba.
Ni Osetia del Sur ni Abjasia son reconocidos por Naciones Unidas
Su presidente se llama Anatoli Bibílov y estuvo este 10 de enero en Caracas durante la ceremonia de asunción del segundo período de Maduro. Bibílov mismo, más exactamente su soberanía está aún en discusión, tras la independencia de Georgia.
Su capital es Tsjinval y cuenta con 80 mil habitantes, que hablan ruso u osetio, pero todos pagan con el rublo ruso. Además, el georgiano es oficial en los territorios con una población de origen predominantemente georgiano.
Osetia del Sur es reconocido por solo 4 países miembros de Naciones Unidas, entre ellos Venezuela, y tres países con reconocimiento limitado.
La República de Osetia del Sur es un territorio situado en el Cáucaso Sur o Transcaucasia. En la época de la URSS fue el "Óblast Autónomo de Osetia del Sur” dentro de la República Socialista Soviética de Georgia.
La población osetia de esta provincia declaró unilateralmente su independencia en 1991 y, tras vencer la guerra con Georgia, se convirtió en una república independiente de facto, aunque Georgia defiende su pertenencia a las regiones tradicionales de Shida Kartli, Mtskheta-Mtianeti, Imericia y Racha-Lechjumi y Kvemo Svaneti, y la denomina por su antiguo nombre de Samachablo o, más recientemente, la región de Tsjinval.
Nauru (Micronesia), Nicaragua, y Venezuela reconocen a Ossetia del Sur
El 26 de agosto de 2008, tras la Segunda Guerra con Georgia, Rusia fue el primer país en reconocer oficialmente la independencia de Osetia del Sur al igual que la de Abjasia. También Nauru, Nicaragua, y Venezuela reconocieron su independencia. Este reconocimiento carece del apoyo de la ONU y lo rechazan la Unión Europea y los Estados Unidos, entre otros.
Osetia del Sur, a su vez, reconoce el segundo mandato del venezolano Nicolás Maduro.
(elm)
Rusia muestra toda su potencia militar (mayo 2017)
El clásico desfile del Día de la Victoria, jornada en la que Rusia conmemora el triunfo sobre la Alemania nazi, sirvió como marco para la exhibición de la fuerza del músculo armado ruso.
Imagen: Reuters/M. Shemetov
La importancia de la iconografía
Banderas de la era soviética, íconos socialistas y soldados coparon la Plaza Roja en Moscú este 9 de mayo. La conmemoración del Día de la Victoria, que este año sumó su versión número 72, es una buena oportunidad para revivir el glorioso pasado de la Unión Soviética, de la que muchos siguen siendo nostálgicos en la actual Rusia.
Imagen: Getty Images/AFP/Y. Kochetkov
Una reliquia de la Segunda Guerra
El tanque T-34 simboliza el poderío del Ejército Rojo y, al mismo tiempo, la rotunda sencillez de la ingeniería soviética. Gracias a ello, pudo ser producido en masa de forma rápida y eficaz para combatir al Ejército nazi. Su presencia en el desfile de este año es, como siempre, un saludo y un homenaje a un arma temible.
Imagen: picture-alliance/dpa/Tass/V. Sharifulin
Mostrar los dientes es poco
Este misil balístico intercontinental Yars RS-24 fue una de las estrellas del desfile. Diseñado para poner en problemas a los escudos antimisiles, está equipado con ojivas termonucleares y tiene un alcance estimado de hasta 13 mil kilómetros.
Imagen: Getty Images/AFP/K. Kudryatsev
Reforzar el patriotismo y a las tropas
En su discurso, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, hizo un llamado al trabajo conjunto para acabar con los problemas que aquejan al mundo. "La comunidad internacional debe unir sus fuerzas para una lucha efectiva contra el terrorismo, el extremismo, el neonazismo y otras amenazas", sostuvo. Añadió que su país debe reforzar sus fuerzas militares y el patriotismo.
Imagen: Reuters/S. Karpukhin
Miles de soldados ante el invitado de honor
Más de 10 mil soldados y unas cien unidades de todo tipo (artillería, transporte) desfilaron en Moscú, donde el presidente de Moldavia, el prorruso Igor Dodon, fue el invitado de honor. También se hicieron presentes, por primera vez, unidades militares especializadas que están preparadas para intervenir en el Ártrico.
Imagen: Reuters/S. Karpukhin
Un saludo de artillería
La artillería rusa dispara para saludar la parada del Día de la Victoria, que marca una de las festividades más patrióticas del país, en la que se recuerda a los casi 30 millones de muertos que sufrió la Unión Soviética en la guerra contra la Alemania nazi, conflicto que en Rusia y otras repúblicas de la región se conoce como Gran Guerra Patria.
Imagen: Reuters/T. Makeyeva
En San Petersburgo sí hubo aviones
A diferencia de Moscú, donde el mal tiempo impidió el paso de los aviones de combate que suelen dar cierre a las conmemoraciones, en San Petersburgo sí fue posible apreciar el sobrevuelo de las aeronaves, que en esta imagen parecen pequeños artefactos a un costado del monumento al emperador Pedro el Grande. En decenas de ciudades y exrepúblicas soviéticas hubo actos similares.
Imagen: Reuters/A. Vaganov
Ceremonias en todo el país
En Divnogorsk, cerca de Krasnoyarsk, decenas de ciudadanos salieron a las calles portando fotografías de sus familiares caídos en los combates de la Segunda Guerra Mundial. Este desfile en particular se conoce como la Marcha del Regimiento Inmortal.