Ni los 35 grados de temperatura, ni la alta humedad relativa del aire, ni los negativos augurios en relación con el rendimiento de los nuevos neumáticos Bridgestone en esas condiciones climáticas hicieron mella alguna en el campeón alemán de Fórmula I: Michael Schumacher volvió a ganar soberanamente el Gran Premio de Malasia, por tercera vez.

¿Quién frena a Schumi?

El equipo de Ferrari celebra, mientras los rivales ya no saben qué pensar, ni qué hacer para recuperar terreno. ¿Y los aficionados a la Fórmula I? Al margen de la legión de admiradores de Schumi, o incluso parte de esas numerosas huestes, comienzan a temer lo peor para esta temporada: que las carreras terminen siempre con el mismo triunfador, quitándole lucimiento a sus triunfos y suspenso a este deporte que vive de la adrenalina.

Según un comentarista de la edición de internet de Der Spiegel, las otras escuderías parecen haber aprovechado el receso invernal para una larga hibernación. Porque, aun cuando en circuito internacional de Sepang llegara hoy segundo un bólido de BMW-Williams, con el colombiano Juan Pablo Montoya al volante, puesto número 2 en la clasificación general de pilotos también le corresponde a uno de Ferrari: el brasileño Rubens Barrichello.

Elogios para Montoya

Michael Schumacher, por su parte, se ha quedado con todos los puntos posibles de obtener en el torneo hasta la fecha: 20. Y está tan satisfecho que no le costó en absoluto derrochar alabanzas para su competidor colombiano. "Fue un trabajo difícil superar a Juan Pablo; hasta el final no supe dónde iba a conducir el viaje", señaló, indicando que Montoya no le dio tregua durante toda la carrera.

A pesar de su segundo triunfo de la temporada, Schumi niega categóricamente que el campeonato de este año amenace con convertirse en un soberano aburrimiento. "Tenemos 20 puntos en el bolsillo; eso es más que lo que teníamos un año atrás. Pero todavía faltan 16 carreras por disputar y allí puede pasar cualquier cosa", afirma el piloto alemán, con la esperanza de que los aficionados no pierdan el interés por sus hazañas.