Bélgica, que está en camino de prohibir el burka y el hiyab, es el país más avanzado en el tema hasta el momento. Su Parlamento votó por unanimidad a finales de abril de 2010 una ley que prohíbe el cubrimiento total en público. La norma deberá ser aún votada en el Senado. Su aprobación aún no está asegurada, ya que algunos congresistas expresaron dudas sobre la constitucionalidad de tal prohibición.

En los Países Bajos, se están preparando al mismo tiempo varios proyectos de ley para prohibir el velo integral, entre otros en escuelas y entidades oficiales. El populista de derecha Geert Wilders apoya fuertemente esta moción. Pero también el alcalde socialdemócrata de Amsterdam, Job Cohen, está a favor de suprimirle a las usuarias del burka el subsidio de desempleo si rechazan un trabajo donde esté prohibido el velo integral.

Multas y cárcel en Francia e Italia

En Francia, el gabinete pasó este miércoles (19.05.2010) un proyecto de ley, que prohíbe el uso de todo velo musulmán en lugares públicos. Si el Parlamento lo aprueba, desde comienzos de 2011, llevar burka o hiyab podría acarrear multas. De acuerdo con la prensa, sobre las mujeres se cierne una sanción por 150 euros. Los hombres que les obliguen a vestir el velo pueden obtener hasta un año de cárcel y tendrán que pagar 15.000 euros.

En Italia ya existen desde 1975 regulaciones para la "protección del orden público". Éstas prohíben el cubrimiento de la cabeza en instalaciones oficiales, ya sea con un velo o un casco de motocicleta. No obstante, la ministra para Cuestiones de Género, Maria Carfagna, quiere incluir en dicha ley la prohibición explícita del burka.

En la actualidad, se encuentran listas cuatro propuestas del Gobierno y de la oposición italiana para el veto de este tipo de velo, con penas de hasta dos años en prisión. Sin embargo, se percibe una cierta resistencia, entre ellos por parte del ministro de Relaciones Exteriores, Franco Frattini.

Partidos políticos austriacos y daneses aún disciernen

En Austria, la coalición de partidos de derecha (BZÖ), una fracción de la FPÖ del difunto Joerg Haider, quiere presentar al Parlamento un proyecto de ley para prohibir el burka. El Canciller socialdemócrata, Werner Faymann, ya declaró que no se puede imaginar en esto en la práctica. El partido co-gobernante conservador aboga por el momento por un amplio debate al respecto.

En Dinamarca, la mayoría de la población está a favor de una prohibición del burka. Los partidos gobernantes, conservador y liberal, no se han puesto de acuerdo sobre este tema, pero anunciaron a finales de enero de 2010, que “combatirían” el velo.

El Gobierno danés, sin embargo, quiere desistir de una ley, ya que existen preocupaciones constitucionales en el ministerio de Justicia al respecto. Pero parte del hecho de que escuelas, autoridades y empresas actúen lo más estrictamente posible sobre el velo integral.

En Suiza y Reino Unido no es tema

En Suiza, de acuerdo con el referendo que prohíbe la construcción de minaretes en este país, se sintieron voces a favor del fomento de la prohibición del velo musulmán. No obstante, un debate en la Cámara Alta fue aplazado recientemente. El Gobierno no ve actualmente ninguna razón para discutir este tema.

En el Reino Unido, dicha prohibición no es por ahora un asunto de debate. Aunque el tema sí se discute en programas de entrevistas y columnas de opinión, todavía ninguna de los tres principales partidos políticos lo ha definido como relevante. Sólo los británicos de extrema derecha exigen la prohibición del burka.

¿Contra Derechos Humanos?

Entre tanto, en el Consejo Europeo soplan vientos en contra de los esfuerzos en Bélgica y Francia. Los diputados se opusieron en el comité sobre cultura sobre la prohibición del velo integral, porque podría entrar en conflicto con la libertad de culto. El Comisario para los Derechos Humanos del Consejo, Thomas Hammarberg, advierte también que la prohibición del burka aumentaría las tensiones entre las comunidades religiosas.

De acuerdo con la Convención Europea para los Derechos Humanos, las limitaciones a la libertad de religión sólo se permiten para proteger la seguridad pública o la democracia. Esto no sería aplicable en ninguno de estos casos.

Autor: Klaus Dahmann / Cristina Mendoza Weber

Editor: Pablo Kummetz