Un total de 15 personas -cuatro civiles, un policía y 10 talibanes- murieron durante las 18 horas de combates entre los extremistas y las fuerzas armadas.

El policía murió la mañana del domingo, y dos agentes resultaron heridos, cuando las autoridades asaltaron el área del suburbio de Pawakaim, a un kilómetro del aeropuerto donde tuvo lugar el ataque inicial y donde se habían atrincherado cinco talibanes.

"Los cinco terroristas fueron abatidos", dijo el jefe de policía de Peshawar, Imtiaz Altaf. "Estaban armados hasta los dientes, con granadas, armas automáticas y ligeras".

La televisión mostró imágenes de tres de los talibanes, que llevaban chalecos suicidas. En el caso de los otros dos, los explosivos detonaron cuando fueron abatidos.

El ataque contra el aeropuerto de Peshawar, que opera vuelos tanto comerciales como militares, comenzó con el lanzamiento de cohetes por parte de los islamistas. Luego acercaron un vehículo cargado de explosivos al muro exterior, que linda con una zona residencial.

La fuerte detonación hizo colapsar varias casas y provocó la muerte de los cuatro civiles y heridas a unos 40, entre ellos mujeres y niños.

La Fuerza Aérea Pakistaní (FAP) informó que sus soldados repelieron el ataque y mataron a cinco talibanes, que tenían además otro coche-bomba. "No ha habido daños al equipo o personal de la FAP y la base ya está bajo control", se indicó en un comunicado.

Los vuelos comerciales han sido reanudados mientras tanto.