En el Oeste de Alemania, situada entre los ríos Mosela y Rin y atravesada por el Bosque del Palatinado y las cordilleras de media montaña de Eifel y Hunsrück, está Renania-Palatinado una región marcada por la agricultura y la viticultura. Por eso se la llama también la región de los tubérculos y las cepas. La zona vitivinícola de Rheinhessen cuenta con el mayor volumen de producción de Alemania y produce año tras año un gran número de vinos premiados. También se cultiva el vino en Ahr, Mosela y Saar.

Región de los tubérculos y las cepas

Renania-Palatinado tiene desde luego más que ofrecer: la Roca Loreley, en el Mittelrheintal –valle del Rin Medio- no sólo pertenece al Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, sino que se encuentra entre las atracciones más visitadas por los turistas extranjeros en Alemania. También la ciudad romana de Tréveris –Trier, en alemán-, la ciudad más antigua de Alemania, el encantador Valle del Mosela o los montes volcánicos y sus interesantes formaciones de rocas son un imán para el público.

En la capital de la región, Maguncia, Johannes Gutenberg inventó la imprenta hace más de 500 años. La catedral de Speyer es considerada una de las construcciones religiosas más impresionantes de Alemania. Allí se hallan enterrados no menos de ocho emperadores y reyes alemanes.

Atractivo paisajístico e histórico

Pese a ser principalmente una región agrícola debido a su estructura, Renania-Palatinado es también la sede de significativas empresas químicas y farmacéuticas, como por ejemplo BASF en Ludwigshafen o la compañía Boehringer en Ingelheim. BASF registró en el 2007 un volumen de negocio de más de 57.000 millones de euros. Boehringer es la última empresa farmacéutica alemana de propiedad familiar.

Si Renania-Palatinado hubiera existido en el siglo XIX, Karl Marx, nacido en Tréveris en 1818, sería probablemente el hijo más significativo de la región. Sin embargo, tal honor podría corresponder al antiguo canciller alemán y durante años presidente del estado federado, Helmut Kohl.