Papa Francisco viaja a Sri Lanka y Filipinas
12 de enero de 2015El Papa Francisco celebró este lunes (12.1.2015) volver a Asia en la gira internacional que emprenderá esta tarde a Sri Lanka y Filipinas, y deseó que "se retome el diálogo entre las dos Coreas, países hermanos que hablan la misma lengua."
Tras cinco meses de su visita a Corea del Sur, el pasado agosto, el obispo de Roma vuelve al continente para manifestar a los ciudadanos y gobernantes asiáticos "una vez más el deseo de la Santa Sede de contribuir al bien común, a la armonía y a la concordia social."
En un discurso pronunciado en la Sala Regia del Palacio Apostólico ante diplomáticos, el pontífice anticipó sobre su séptimo viaje internacional: "Esta tarde tendré la alegría de volver a Asia, para visitar Sri Lanka y Filipinas, y mostrar así el interés y la solicitud pastoral con que sigo los acontecimientos de los pueblos de ese vasto continente."
A pocas horas de iniciar el trayecto, Bergoglio instó desde su cuenta de Twitter: "Hoy, que comienza mi viaje a Sri Lanka y Filipinas, les pido que recen conmigo por estos dos países."
Está previsto que el Papa viaje esta tarde a las 19.00 locales desde Roma a bordo de un avión de la compañía Alitalia y recorra Sri Lanka y Filipinas hasta el próximo 19 de enero.
Pedido a los Gobiernos
El Papa Francisco también instó a los Gobiernos a aprobar legislaciones que tutelen "los derechos de los ciudadanos" y garanticen "la acogida a los inmigrantes." Pidió asimismo "actuar sobre las causas y no solamente sobre los efectos."
El obispo de Roma se preguntó: "¿Cuántas personas pierden la vida en viajes inhumanos, sometidas a vejaciones por parte de auténticos verdugos, ávidos de dinero?" Y lamentó la situación que atraviesan aquellos que "llegan sin documentos a lugares desconocidos, cuya lengua no hablan" y les es "difícil (...) encontrar trabajo."
Ante este panorama, el pontífice ahondó en la necesidad de "un cambio de actitud: pasar de la indiferencia y del miedo a una sincera aceptación del otro." Sin embargo, aplaudió la labor de "aquellos que se dedican a prestar asistencia a los refugiados y a los inmigrantes, a costa de su propia vida."
Asimismo, exhortó a la comunidad internacional a "actuar decididamente para resolver estas graves situaciones humanitarias y prestar la ayuda necesaria a los países de origen de los inmigrantes para favorecer su desarrollo socio-político y la superación de los conflictos internos, que son la causa principal de este fenómeno." Solo así, subrayó, estos refugiados y desplazados que han huido de sus lugares de origen podrán "volver un día a su patria y contribuir a su crecimiento y desarrollo."
SZ (efe)