El viernes por la noche comenzó la decimosexta noche consecutiva de violencia, con 10 coches incendiados en Toulouse, en el suroeste del país, dijeron las autoridades locales.

La intensidad de los disturbios más graves que ha vivido Francia en cuatro décadas ha caído desde que el gobierno del presidente Jacques Chirac impuso medidas de emergencia que incluyen toque de queda, ante la violencia juvenil que protesta por el racismo y las condiciones de los barrios más pobres.

La policía dijo que en la noche del jueves se incendiaron 463 vehículos, un pequeño descenso sobre la jornada anterior, pero en la zona de París se quemaron 111, frente a los 84 de la noche del miércoles.

"Esto confirma la tendencia global a la baja, con alguna resistencia en la zona de París", declaró a los periodistas el jefe nacional de la policía Michel Gaudin.

La prohibición para las manifestaciones en París tendrá lugar desde las 10.00 de la mañana del sábado a las 8.00 del domingo, hora local.

Según confirmó Gaudin, habrá una vigilancia policial reforzada. En la capital se han movilizado unos 3.000 agentes y se han aumentado los efectivos en otras ciudades.