La rama bávara de la Unión Demócrata Cristiana de la canciller alemana Angela Merkel, la Unión Socialcristiana (CSU), amenaza con convertirse en un importante escollo para la mandataria de cara a las futuras decisiones para combatir la crisis de la deuda europea. Los correligionarios de Merkel en Baviera debatirán mañana sobre un documento en el que demandan la expulsión de la eurozona de los países que incumplan los límites de déficit, un "no absoluto" a los eurobonos y límites vinculantes de déficit para todos los países. "Rechazamos de plano que se socialicen las deudas, lo que ocurriría con la emisión de eurobonos", dijo hoy a dpa el secretario general de la CSU, Alexander Dobrindt, uno de los autores del documento. Queremos poner "carteles de alto" en la crisis de la deuda para evitar que Alemania se vea afectada de forma ilimitada, explicó el político. dpa