El objetivo es 'estabilizar' la situación en la zona devastada por 'Katrina', dijo hoy el jefe de la operación militar.

'Más de 4.000 soldados, en su mayoría de la Policía Militar, han ido ya a Nueva Orleans', señaló en una conferencia de prensa el jefe de la Fuerza de Tareas Katrina (FTK), general Russel Honoré.

La FTK se ha establecido en Camp Shelby, una zona para instrucción militar sobre la carretera interestatal 49 al norte de Gulfport, en Mississippi, y a unos 100 kilómetros al noreste de Nueva

Orleans, en el vecino estado de Louisiana.

'Es una situación muy difícil y cuesta comprender la enormidad de la emergencia', dijo Honoré. De acuerdo con la ley Posse Comitatus, las fuerzas militares regulares, en servicio activo, de Estados Unidos no pueden cumplir labores policiales dentro del país, pero las tropas de la Guardia

Nacional, que están bajo la autoridad de los gobiernos de cada Estado, sí pueden hacer esas labores.

Honoré señaló que la policía de Nueva Orleans y la Guardia Nacional de Luisiana están a cargo del mantenimiento del orden en el estadio 'Superdome' de esa ciudad, donde hay más de 60.000 personas que han estado sin alimentos, agua corriente y electricidad desde el martes.

Las autoridades de Louisiana iniciaron la evacuación de esas personas, pero la operación quedó interrumpida cuando hubo disparos de armas de fuego contra los helicópteros militares.