Represión de las protestas en Perú: ¿un genocidio?
Isabella Escobedo
12 de enero de 2023
Defensores de derechos humanos miran con preocupación hacia Perú, por la incesante violencia durante las protestas. Mientras, la Fiscalía Nacional investiga a la presidenta por presunto genocidio y otros crímenes.
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Un mes tras el inicio de las protestas contra Dina Boluarte en Perú, la escalada de violencia no amaina y el número de fallecidos asciende a 47. También la preocupación por la salvaguardia de los derechos humanos crece, de tal forma, que el Secretario General de la ONU, António Guterres, instó este miércoles (12.01.2023) a las autoridades a garantizar el respeto a los derechos humanos y a velar por que se lleve a cabo una investigación de los crímenes. El mismo día, una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos aterrizó en Perú para verificar la situación.
Miguel Levano, Coordinador de Programas y Alianzas de Oxfam Perú, expresó a DW su preocupación por la "intervención y represión desmesurada" por parte de la Policía, una "represión sin justificación legal". Levano comenta que no se están cumpliendo "las limitaciones para el uso de armas letales que establecen las normas nacionales e internacionales".
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Falta de respuesta de las autoridades
El experto añade a esto la falta de respuesta de las autoridades, que en vez de reconocer la mala gestión de su intervención, toma una narrativa defensiva, justificadora e "inclusive discriminatoria, porque está indicando que la gente que sale a protestar son vándalos, terroristas".
"En paz y orden todo se puede lograr, en mitad de la violencia y el caos se complica más, se hace difícil", había dicho Boluarte este lunes (09.01.2023) en un evento. También el primer ministro Alberto Otárola, durante una rueda de prensa, culpó al expresidente Castillo y a sus aliados, afirmando que ellos habían incitado a la violencia. "Ellos son los responsables", dijo, "y no nuestros policías".
Violación sistemática de derechos
"Lo que nos queda claro en estos momentos es que no estamos ante decisiones personales de los mandos policiales y militares, sino que estamos ante una política de Estado", asegura Mar Pérez, responsable de la unidad de defensores de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, una coalición que agrupa a 78 organizaciones.
Uno de los principales indicios de la violación sistemática de los derechos humanos, según la experta, es la declaratoria del estado de emergencia a nivel nacional. "La suspensión de derechos siempre debería ser una medida muy excepcional y muy restringida, en todo caso a espacios geográficos donde hay una conflictividad social muy álgida", explica Pérez.
Investigación por genocidio: ¿cortina de humo?
La Fiscalía de la Nación de Perú ha tomado medidas y ha abierto este martes una investigación preliminar a la presidenta Dina Boluarte, tres ministros y dos exministros, por distintos delitos, entre ellos, el genocidio, homicidio calificado y lesiones graves.
En opinión de Pérez, mientras sí se puede hablar de delitos de lesa humanidad y graves violaciones de derecho, la acusación de genocidio "no se sostiene técnicamente, porque el genocidio implica una serie de ataques contra la población que buscan eliminar a un determinado grupo".
La idea, de que la Fiscalía presente una acusación insostenible por falta de rigor técnico, le parece inverosímil. A la experta le preocupa que pueda tratarse de una cortina de humo, "construyendo intencionalmente una acusación que no tiene fundamento y que pueda después rebotar en el Congreso".
Querda por ver, si esta preocupación se hace realidad, pero para Mar Pérez "lo único que puede traer la paz social al Perú es la renuncia de Dina Boluarte y el adelanto de elecciones". (rml)
La crisis en Perú empeora y la Fiscalía investiga a la nueva presidenta
Los enfrentamientos en Perú entre partidarios del expresidente Pedro Castillo y las fuerzas de seguridad se han cobrado ya más de 40 vidas. Su sucesora, Dina Boluarte, será investigada.
Imagen: Klebher Vasquez/AA/picture alliance
Escalada de violencia
Fuerzas armadas de seguridad atacaron a simpatizantes del expresidente Pedro Castillo en Juliaca. Solo el lunes 9 de enero de 2023, fallecieron 17 personas en los enfrentamientos. Castillo fue destituido y arrestado a principios de diciembre, después de intentar disolver el Congreso y gobernar por decreto.
Imagen: Hugo Courotto/REUTERS
Batallas campales en las calles
Las protestas posteriores de los partidarios de Castillo ya han sumado
más de 40 muertes, en su mayoría civiles. Los grupos de derechos humanos han acusado a las fuerzas de seguridad de usar armas letales y lanzar bombas de humo contra los manifestantes.
Imagen: Juan Carlos Cisneros/AFP
Protestas violentas
La escalada de violencia comenzó el lunes, cuando alrededor de 9.000 manifestantes intentaron asaltar el aeropuerto de Juliaca y se enfrentaron a las fuerzas de seguridad. Representantes de la Iglesia Católica describieron los brotes de violencia como una "situación de guerra". El país está "en manos de la barbarie", dijeron.
Imagen: Hugo Courotto/REUTERS
Dina Boluarte en el ojo del huracán
La presidenta Dina Boluarte se dirigió al país en rueda de prensa. El fiscal general de Perú anunció el martes (10.01.2023) que se investigará a Boluarte y a su entorno. La acusación es por "genocidio, asesinato y lesiones corporales graves". La exvicepresidenta de Pedro Castillo fue nombrada presidenta por el Parlamento, tras la destitución de Castillo. Pero tiene muy poco apoyo político.
Imagen: Martin Mejia/AP Photo
Manifestantes exigen la renuncia de Boluarte
Los seguidores del expresidente Castillo exigen la renuncia de Boluarte y nuevas elecciones. El país no se ha calmado desde que el político de izquierda fuera destituido y su sucesora y antigua aliada declarara el estado de emergencia.
Imagen: Martin Mejia/AP Photo
El apoyo de la periferia
La ciudad de Juliaca, en el departamento de Puno y en la frontera con Bolivia, es el hogar de muchos aimaras y es el epicentro de las protestas de los simpatizantes de Castillo. A pesar de sus planes autoritarios, el expresidente sigue recibiendo el apoyo de los pobres en los Andes y de la periferia de las grandes ciudades.
Imagen: Hugo Courotto/REUTERS
Manifestantes llenan las calles de Puno
Miles de opositores del nuevo Gobierno también protestaron el lunes en la ciudad andina de Puno. Protestan porque creen que el Congreso y los parlamentarios son incluso menos creíbles que el presidente destituido. Gran parte de la élite política está acusada de sacar ventaja personal durante la crisis.
Imagen: Juan Carlos Cisneros/AFP
Piedras contras las fuerzas de seguridad
Además de manifestantes pacíficos, también hubo un gran número de personas protestando con violencia en las calles: el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, los responsabiliza de las numerosas muertes y acusa al expresidente Castillo y a sus seguidores de incitar a la violencia para desestabilizar al nuevo Gobierno.
Imagen: Hugo Courotto/REUTERS
Muertos en Juliaca
Los residentes rodearon el martes los ataúdes de los muertos por los enfrentamientos del lunes en Juliaca. El toque de queda ha estado vigente en la región desde la noche del martes. Pero eso no impide que los opositores salgan de nuevo a las calles a protestar contra el nuevo Gobierno.