Cada vez hay más peregrinos dispuestos a buscar un sentido religioso a sus vidas. En cada continente hay lugares específicos en los que los creyentes se reúnen a satisfacer sus necesidades espirituales. El tema da para mucho, y de ello han tomado nota en el museo Rautenstrauch-Joest de Colonia, en Alemania, donde se ha montado una exposición al respecto.

Peregrinos en el mundo

En los distintos continentes hay personas que se reúnen para peregrinar. Desde Santiago de Compostela en España y Colonia en Alemania, a Kerbala en Irak y Kailash en el Tíbet. Los asiáticos peregrinan días, meses e incluso hasta años. En el ascenso al Kang Rinpoche, los budistas tienen que bregar con la abstinencia y así obtener una recompensa por las dificultades atravesadas. En Ajmer, en India, los peregrinos comen alrededor de 7.000 kilos de arroz servido en enormes ollas. Todo Hindi y Sufri debe ser bien alimentado para la visita al templo Sheikh Moinuddin Chishti del profeta Schrein. 

Un desafío

Lo que hace el tema más interesante son las dimensiones logísticas, económicas, y políticas de las peregrinaciones. A los viajeros se les tiene que proveer comida, hospedaje, artículos de higiene y medicamentos. Las peregrinaciones toman un aspecto comercial, como la venta en masa de imágenes de la virgen de Guadalupe en las calles de Ciudad de México. El 11 y 12 de diciembre se acercan entre seis y ocho millones de peregrinos a la basílica. En el trayecto, los peregrinos avanzan en medio de penumbras, para no perder el clima místico. Los peregrinos deben tener un sostén económico que les permita emprender este largo camino.

Sin hotel en Touba

En la ciudad sagrada de Touba, en Senegal, todos los años entre dos y cinco millones de peregrinos de la comunidad sufista se reúnen en la mezquita de Amadou Bamba, un teólogo musulmán que vivió entre 1853 y 1927. Touba no tiene un solo hotel para atender a los peregrinos. Sin embargo, eso no es necesario: los viajeros alojan en casas privadas, en las que hasta cuarenta personas pueden dormir por cuarto.

Peregrinos europeos en Santiago de Compostela y Colonia

La ruta de peregrinaje a Santiago de Compostela cuenta con 42.000 kilómetros. En el trayecto los peregrinos se pueden hospedar en diversos albergues. En Colonia, Alemania, alrededor de 10.000 personan visitan a diario el relicario de los tres reyes magos en la Catedral de la ciudad. En la exposición "Pilgern. Sehnsucht nach Glück?” (Peregrinos: ¿en busca de la felicidad?) se exhiben distintas estaciones en las que uno puede informarse sobre las culturas y curiosidades de cada peregrinación a nivel mundial.

Autora: Sabine Oelze