Desinformación, nuevas tecnologías, violencia contra reporteros: nunca antes el periodismo había enfrentado tantos desafíos. Sobre ellos se debate en el Global Media Forum, organizado por Deutsche Welle, en Bonn.
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Periodistas, políticos y representantes de la sociedad civil de todas partes del mundo se han dado cita en Bonn, para participar en el Global Media Forum. Entre ellos se cuenta Yusuf Omar, reportero de la CNN. Se define como un "periodista de jeans” y explica que todo lo que necesita para informar debe caber en el bolsillo de sus pantalones. A su juicio, los formatos de móviles constituyen "el mayor cambio desde la invención de la televisión”. Concretamente menciona las "historias” temporales de las redes sociales y habla de la democratización de los videos en vivo, asegurando que "cualquiera emite hoy en vivo con su celular”.
Omar, que cuenta con más de 11.000 seguidores en Twitter, cuenta sobre víctimas de violaciones en India, que utilizan el filtro de Snapchat para relatar sus historias en forma anónima; un proyecto por el cual recibió el primer premio de Snapchat de la historia ("The Ghosties”). También habla de sus despachos sobre la guerra siria vía celular y de comunidades de Nueva Delhi a las que entusiasmó para que contaran historias por Instagram.
Los peligros de la nueva era
El joven periodista está consciente de los peligros que conlleva el vertiginoso desarrollo tecnológico. ¿Pasa a pérdida la calidad con los nuevos formatos? Según Omar, las decisiones que debe tomar un reportero jamás fueron tan complejas, comenzando por la elección del medio a utilizar para transmitir la información.
Pero las nuevas tecnologías no son el único desafío que enfrenta el periodismo. El Global Media Forum de este año, con el lema "Identidad y diversidad”, se ocupa también de la identidad del periodismo en tiempos de una creciente restricción de la libertad de prensa y de un aumento de la violencia contra reporteros. Tan solo en Turquía han sido detenidos cerca de 150 periodistas desde el fallido intento de golpe de estado y múltiples medios de comunicación han sido cerrados.
"A pesar de ocho resoluciones de la ONU, observamos que la seguridad de los periodistas sigue disminuyendo”, señaló Franc La Rue, subdirector de la UNESCO. Afirmó igualmente que en Internet hay un dramático aumento del acoso sexual contra mujeres periodistas.
Los valores de siempre
Un presidente estadounidense que califica a periodistas de enemigos del pueblo; el surgimiento del concepto de política "post-factual”; el temor generalizado a los bots de opinión y las "fake news”. ¿Cuál es la salida a la crisis? "El problema no está afuera, sino adentro”, opinó la laureada periodista estadounidense Amanda Bennet, mientras recorría el Global Media Forum. "Me gustó la ponencia de Yusuf Omar y llevaré muchas ideas a mi redacción. Pero los valores tradicionales del periodismo se están perdiendo lentamente. Tenemos que frenarnos, investigar, buscar incansable y rigurosamente la otra cara de las historias”, indicó. A su juicio, las elecciones estadounidenses demostraron cuán importante es publicar también verdades incómodas; verdades de personas cuya opinión uno no comparte.
Similar es la visión de la ministra alemana de Economía, Brigitte Zypries, que consideró fundamental el respeto a las opiniones diferentes. Aplausos cosechó su advertencia contra las "burbujas de filtro” que ponen en peligro el debate democrático.
Las tares son múltiples y numerosos los frentes en que hay que dar la batalla, pero en el World Conference Center de Bonn se respiró esta mañana también un ambiente de optimismo. "No somos los enemigos; trabajamos a favor de las personas”, dijo el director general de DW, Peter Limbourg. Dirigiéndose a los déspotas del mundo, afirmó: "Ustedes no podrán reprimir eternamente la libertad de opinión. Ella es más fuerte que ustedes. El gobernante que conculca la libertad de prensa, a corto o largo plazo fracasará”.
Libertad de prensa: periodistas en la mira (02.05.2017)
Perseguidos, detenidos, torturados, asesinados: los periodistas son atacados por gobiernos, carteles o extremistas religiosos. En el Día Mundial de la Libertad de Prensa, DW les presenta a algunas víctimas. (02.05.2017)
Imagen: Getty Images/AFP/S. Hamed
China: Gao Yu
Periodistas disidentes, blogueros y activistas viven en China bajo una gran presión. Gao Yu, exr colaboradora de DW, fue detenida en 2014 y condenada en abril de 2015 a siete años de prisión por supuesta “filtración de secretos de Estado”. Bajo la presión internacional se le permitió salir de la cárcel y cumple su condena bajo arresto domiciliario.
Imagen: DW
Rusia: Nikolai Andruschtchenko
Tras una golpiza en calles de San Petersburgo, Nikolai Andruschtschenko sucumbió a sus heridas el 19 de abril de 2017, a los 73 años de edad. El periodista escribió sobre violaciones de los derechos humanos y delincuencia. En su último reportaje, Nikolai Andruschtchenko investigó sobre cómo el presidente Wladimir Putin había llegado al poder.a través de enlaces criminales y la KGB.
Imagen: picture-alliance/dpa/D. Usov
México: Miroslava Breach
Miroslava Breach fue literalmente ejecutada, al frente de su casa, el 23 de marzo de 2017 por un sicario que le dio ocho disparos en la cabeza. La periodista informaba sobre la corrupción y los crímenes de los carteles mexicanos de la droga. Miroslava Breach es una de los tres periodistas asesinados en marzo en México.
Imagen: picture-alliance/NurPhoto/C. Tischler
Irak: Shifa Gardi
La reportera Shifa Gardi murió el 25 de febrero de 2017, cuando una mina explotó en uno de los frentes de la guerra en el norte de Irak. Nacida en Irán, trabajaba para el canal de noticias kurdo Rudaw en Erbil e informaba sobre la lucha entre las fuerzas iraquíes y las milicias islamistas. En cercanías de Mossul, el Estado Islámico acostumbra a secuestrar, desterrar y matar a periodistas.
Imagen: picture alliance/dpa/AA/F. Ferec
Bangladesch: Avijit Roy
"Mukto Mona" o "Espíritu libre" era el nombre del blog crítico del islamismo radical de autoría de Avijit Roy, un "humanista secular". Avijit Roy vivía en EE. UU., desde donde viajó a la Feria del Libro a Dacca en febrero de 2015. Allí, fanáticos religiosos lo descuartizaron en la calle a machetazos. En Bangladesh, los bloggers siguen siendo perseguidos y asesinados por extremistas.
Imagen: Getty Images/AFP/M. U. Zaman
Arabia Saudí: Raif Badawi
A diez años de prisión y 1.000 latigazos fue condenado este activista internáutico por haber, supuestamente, “insultado el Islam”. Raif Badawi se encuentra en prisión desde 2012. En enero de 2015 fue azotado públicamente por primera vez. Canadá le ofreció asilo a su esposa Ensaf Haidar y sus hijos.
Imagen: Imago/C. Ditsch
Turquía: Deniz Yücel
El periodista germano-turco Deniz Yücel se encuentra en una prisión turca desde febrero de 2017. Las acusaciones contra el corresponsal del diario berlinés "Die Welt": propaganda terrorista e incitación a la rebelión. Las autoridades, empero, no han presentado una sola evidencia. Más de 140 trabajadores de los medios han sido detenidos desde el intento de golpe de Estado en julio de 2016.
Imagen: picture-alliance/dpa/C.Merey
Azerbaiyán: Mehman Huseynov
Huseynov, uno de los videobloggeros más populares Azerbaiyán, publica una revista digital sociopolítica en la que critica la corrupción y violaciones de derechos humanos. Su campaña "caza de funcionarios corruptos" apunta a los más altos cargos involucrados en casos de corrupción en su país. Ha sido amenazado en repetidas ocasiones y condenado en marzo de 2017 por difamación a dos años de prisión.
Imagen: twitter.com/mehman_huseynov
Venezuela: Braulio Jatar
El periodista chileno-venezolano Braulio Jatar, editor del portal Reporte Confidencial, fue detenido el 3 de septiembre de 2016 por presunta "legitimación de capitales". Se cree empero, que su aprehensión se debe a que fue uno de los primeros en dar a conocer el cacerolazo a Nicolás Maduro en Villa Rosa, Nueva Esparta. “Braulio Jatar lleva 8 meses preso por informar", dijo su hermana Ana Julia.
Imagen: el-nacional.com
Cuba: Detenciones temporales, ¿la nueva estrategia contra la prensa?
Maykel González, de El Estornudo, fue retenido el 24 de abril en la Universidad Central Marta Abreu, cuando hacía reportaje sobre expulsión de la estudiante Karla Pérez. El periodista fue interrogado varias horas y confiscados sus equipos. Por otro lado, Reporteros sin Fronteras recuerda a Yoeni Guerra, de Yayabo Press, preso desde el 13 marzo 2014, y José Torres, de Granma, desde mayo de 2011.