Personal de la ONU sale ileso de ataque en Colombia
28 de enero de 2022
El ataque fue perpetrado en la localidad de Puerto Nuevo, en el departamento del Guaviare, donde dos de sus tres vehículos resultaron calcinados.
Publicidad
Un convoy de tres vehículos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y del Consejo Noruego de Refugiados (CNR) fue atacado este jueves (27.01.2022) por hombres armados cuando se dirigía a San José del Guaviare, en el centro-sur de Colombia, atentado del que todos sus miembros salieron ilesos.
El ataque fue perpetrado en la localidad de Puerto Nuevo, en el departamento del Guaviare, donde dos de los tres vehículos resultaron calcinados, confirmó el organismo internacional. "La Misión de Verificación de la ONU en Colombia rechaza firmemente el ataque que sufrió nuestro equipo local de San José del Guaviare en Puerto Nuevo, Guaviare, cuando se encontraba realizando una misión conjunta con la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA)", señaló la ONU en un comunicado.
Según la fuente, "la misión conjunta se dirigía a la zona rural del Guayabero para reunirse con las comunidades de la zona, cuando fueron abordados por personas armadas quienes les hicieron descender de los vehículos". Minutos más tarde, dos de los tres vehículos de la comitiva fueron quemados en el lugar de los hechos, agrega el comunicado de la Misión de Verificación de la ONU. "Los integrantes de la misión regresaron ilesos a las oficinas de la ONU en San José del Guaviare", subrayó el organismo internacional.
"Absolutamente condenable el ataque que se ha presentado en contra de vehículos de la Misión de Verificación de las Naciones Unidas y de la organización OCHA de derechos humanos ", dijo por su parte el consejero presidencial para la Estabilización y la Consolidación, Emilio Archila, quien destacó que "afortunadamente han salido ilesos la totalidad de los integrantes".
En el Guaviare, un departamento en el que confluyen la Orinoquía y la Amazonía, operaron durante décadas varios frentes de las FARC y tras la firma del Acuerdo de Paz, en noviembre de 2016, se crearon en la zona varios Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación para excombatientes de la antigua guerrilla. La Procuraduría General de la Nación informó por su parte que, aunque aún no ha habido un pronunciamiento oficial de quien está detrás del ataque, medios locales -citando fuentes militares- lo achacan a disidencias de las extintas FARC.
"La Misión de Verificación de la ONU reitera su preocupación por la persistencia de hechos de violencia en zonas priorizadas para la implementación del Acuerdo de Paz y condena cualquier intento de intimidación de los grupos armados ilegales contra el trabajo de la ONU y de las organizaciones humanitarias", agregó el comunicado de ese organismo.
Sobre la zona donde se produjo el ataque la Defensoría del Pueblo emitió en agosto de 2020 una alerta temprana por la presencia de varias facciones disidentes de las FARC y las paramilitares Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) o Clan del Golfo, dedicadas a la minería ilegal y actividades de narcotráfico.
ama (efe, afp)
Acuerdo de Paz en Colombia: 52 años de guerra y cinco de paz
Hace cinco años, Colombia firmó la primera versión del Acuerdo de Paz con las FARC, que luego fuera complementado y suscrito el 24 de noviembre de 2016. Los guerrilleros fueron primero idealistas, y luego criminales
Imagen: picture-alliance/dpa
Los campesinos se convierten en un ejército
A mediados del siglo XX se libra una batalla entre bandos políticos de Colombia. Los grupos de izquierda crearon repúblicas independientes en zonas remotas, que fueron tomadas gradualmente por las tropas gubernamentales. Dos de los líderes de la "República de Marquetalia" se escapan: en 1966 Manuel Marulanda y Jacobo Arenas (izq.) fundan las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC).
Imagen: ALATPRESS/AFP
La insurgencia como forma de vida
En el Amazonas, los campesinos tienen una ventaja táctica: conocen el terreno. Pronto las FARC aprenden de otros grupos guerrilleros de América Latina y comienzan a reclutar a estudiantes y habitantes de los barrios marginales de las ciudades, entre ellos, más de 18.000 menores. Las mujeres también se unen, o son obligadas a unirse a los rebeldes. Aunque tienen estrictamente prohibido tener hijos.
Imagen: ALATPRESS/AFP
Mercenarios, narcotraficantes, extorsionadores
Más tarde, varios frentes del grupo marxista se involucran en el narcotráfico: se ofrecen como mercenarios a los cárteles de la cocaína y luego participan en el cultivo. Mientras el ejército colombiano, con el apoyo de Estados Unidos, destruye las zonas de cultivo y los laboratorios de drogas (foto), las ganancias suben.
Imagen: Guillermo Legaria/AFP
El secuestro como modelo de negocio
Los ingresos de las FARC se llegaron a estimar en cientos de millones de dólares al año. También, producto del secuestro que ellos llamaban “toma de rehenes”. Las FARC habrían secuestrado a casi 10.000 personas entre 1970 y 2010. La víctima más destacada fue la política ecologista Ingrid Betancourt en 2002. Sólo después de 6 años las fuerzas militares liberaron a Betancourt y a otras 14 víctimas.
Imagen: Remi Ochlik/MAXPPP/picture alliance/dpa
La lucha por la paz
Ya en la década de 1980, las FARC negociaron un frágil alto el fuego inicial con el gobierno colombiano. En los años 90, presentaron un programa político de diez puntos. En 2001, el líder de las FARC Manuel Marulanda (derecha) se reúne con el presidente Andrés Pastrana para reanudar las conversaciones de paz. Pero la reunión no tuvo éxito.
Era poco probable que las FARC y el gobierno colombiano llegaran a un acuerdo, entre otras cosas, porque los rebeldes intensificaron los actos terroristas durante las negociaciones. No mostraban ninguna consideración por las víctimas civiles, como aquí en Medellín, en 2003, cuando un coche bomba hirió a 30 personas y mató a seis, entre ellas a un niño pequeño.
Imagen: Vergara/AFP/picture alliance/dpa
Terror de izquierda y de derecha
La Masacre de Bojayá es el nombre con que se conoce este crimen de lesa humanidad. En esta iglesia del Chocó murieron unos 119 civiles, víctimas de la explosión de una pipeta de gas lanzada por las FARC el 2 de mayo de 2002. El crimen fue cometido en enfrentamientos con paramilitares (AUC) por el control del acceso al río Atrato. Unas 250.000 personas murieron en el conflicto, la mayoría civiles.
Imagen: picture-alliance/dpa
Guerrillas debilitadas
Álvaro Uribe, elegido presidente en 2002, intensifica la guerra. El 1° de marzo de 2008, la Fuerza Aérea de Colombia mata al subjefe de las FARC, Raúl Reyes, y poco después muere Marulanda. Su sucesor también cae en 2011. En 2008, las FARC se habían reducido a unos 8.000 miembros, frente a los 20.000 de la década de 1990. La mayoría desertó. Juan Manuel Santos era entoces ministro de Defensa.
Imagen: MAURICIO DUENAS/AFP/Getty Images
Colombia firma el Acuerdo de Paz
Así debilitadas, las FARC inician conversaciones de paz con el nuevo presidente, Juan Manuel Santos (izq.). Las negociaciones tendrán lugar en Cuba. El 26 de septiembre de 2016, el líder rebelde Timoleón Jiménez (centro) y Santos firman la primera versión del Acuerdo de Paz. Una estrecha mayoría de colombianos votó en contra en un referéndum no vinculante.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Castaneda
El desarme de los rebeldes
Al firmar, las FARC se comprometen a desarmarse. Unos cientos de rebeldes se niegan, los otros 7000 aproximadamente se enfrentan a la reintegración en la vida civil. Los sospechosos de haber cometido violaciones de los derechos humanos son llevados ante un tribunal especial. A principios de 2021, los miembros de la dirección también fueron acusados por primera vez.
Imagen: Fernando Vergara/AP Photo/picture alliance
Reconciliación entre guerrilleros y víctimas
Algunos excombatientes de las FARC trabajan activamente por la reconciliación con la sociedad colombiana, y especialmente con sus víctimas. Aquí, el exguerrillero Rodrigo Granda se reúne con la hermana de dos víctimas de secuestro para pedir perdón. Las víctimas también participan en proyectos de reinserción.
Imagen: Fernando Vergara/AP Photo/picture-alliance
Todavía queda mucho camino por recorrer
Las FARC son ahora un partido político: Los Comunes. Pero muchos acusan al Gobierno de Iván Duque de no aplicar partes esenciales del Acuerdo de Paz. Algunos rebeldes regresaron a grupos armados criminales. Entre ellos, los dos principales negociadores del Acuerdo de paz, Iván Márquez y Jesús Santrich. A mediados de 2019, anunciaron en un video que había comenzado la "segunda Marquetalia".