Pese a la violencia, afganos votan en elección presidencial
14 de junio de 2014 Los talibanes habían advertido y cumplieron su promesa, al menos en parte. Este sábado (14.06.2014) se realizó la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Afganistán, y si bien participaron más de siete millones de ciudadanos, hubo ataques, atentados y combates que empañaron el proceso. En las refriegas fallecieron decenas de personas, entre ellas 20 civiles, 15 soldados, 11 policías y un empleado de la Comisión Electoral.
Además, las fuerzas de seguridad abatieron a 60 talibanes, en una jornada en la que el Ministerio del Interior aseguró que se registraron unos 150 ataques terroristas. Entre las víctimas civiles hay cinco niños, que murieron cuando un misil estalló en su vivienda. Los talibanes, en tanto, reconocieron ataques contra 246 objetivos. El Gobierno desplegó a 400.000 efectivos de seguridad para proteger a los votantes y a los centros de sufragio.
Pese a las amenazas, el despliegue de seguridad propuesto por el gobierno parece haber surtido efecto y un 60 por ciento de los 12 millones de electores habilitados para participar en las votaciones, llegaron a las urnas para decidir quién reemplazará al actual mandatario, Hamid Karzai, quien no puede ir a un tercer mandato pues la Constitución lo prohíbe. Los candidatos son el exministro de Exteriores, Abdullah Abdullah, y el exministro de Finanzas, Ashraf Ghani.
Brutalidad de los talibanes
Yusuf Nooristani, de la Comisión Electoral, dijo a la prensa que un 38 por ciento de las personas que votaron fueron mujeres, y afirmó que la participación electoral superó en cerca de un diez por ciento a la de la primera vuelta. Los resultados de las votaciones no se conocerán hasta comienzos de julio, y un mes más tarde se espera que se haga el traspaso de mando.
En Kabul y otras ciudades se pudo ver a lo largo de la jornada largas colas ante los centros de votación. Sin embargo en algunas áreas rurales testigos informaron que los talibanes disuadieron a los votantes e incluso se denunció un caso en que once votantes fueron atacados por los insurgentes, quienes les cortaron sus dedos índices, necesarios para votar, según funcionarios del ministerio del Interior.
El titular de esa cartera, Omar Daudzai, dijo que “la seguridad en las elecciones estuvo mejor que en la primera vuelta a pesar de que los niveles de amenaza fueron mayores. La gente votó por rechazar a los talibanes. Hubo algunas bajas en nuestro bando, pero sin duda el enemigo ha fallado en su intento”. En la primera ronda, Abdullah obtuvo el 45 por ciento de las preferencias, mientras que Ghani consiguió un 31,6 por ciento de los apoyos.
DZC (dpa, AFP)