Dicen los comentaristas que ya ha llegado al Olimpo. El nadador estadounidense Michael Phelps, en todo caso, ha demostrado ser todo un fenómeno, en el mejor sentido de la palabra. Con sus triunfos en los 200 metros estilo mariposa y en relevo 4x200m, sumó este miércoles dos nuevas medallas de oro a su colección. Sumando las que ganó en Atenas, hace 4 años, lleva ya 11, lo cual lo convierte en el deportista más existoso que se recuerde en la historia de los Juegos Olímpicos.

Michel Phelps, tras su triunfo en los 400 metros mariposa.

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La espadachina alemana Britta Heidemann también cumplió hoy sus sueños, al ganar la medalla de oro, tras vencer a la rumana Ana Branza.

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Y también los hombres vieron coronarse a uno de los suyos en estos Juegos Olímpicos. Benjamin Philip Kleibrink se convirtió en el primer alemán en ganar una medalla de oro en florete, al vencer al japonés Yuki Ota.

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Munkhbayar Dorjsuren nació en Mongolia, pero es alemana y obtuvo para la delegación germana una medalla de bronce en pistola, 25 m. El oro fue para la tiradora china Chen Ying y la plata para Gundegmaa Otryad, de Mongolia, a quien se ve en la foto junto a Dorjsuren.

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La alemana Annett Böhm, a quien se ve aquí luchando con la estadounidense Ronda Rousey, perdió en cambio por poco la oportunidad de subirse al podio. Ronda se quedó con la medalla de bronce en judo.

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Las alemanas sufrieron este miércoles su segunda derrota en balonmano y corren el riesgo de no pasar a la siguiente ronda. Las húngaras triunfaron por 25:24.