"Devolver a la gente a Marruecos no es una respuesta a esta crisis", señaló Holly Cartner, directora de la organización Human Right Watch (HRW) para Europa y Asia Central. "Proteger a esta gente extremadamente vulnerable debe ser la prioridad del gobierno español", agregó Cartner en un comunicado.

La organización recuerda que en las dos últimas semanas alrededor de 2.000 personas han tratado de entrar de forma ilegal en las dos ciudades españolas situadas en el norte de África y al menos 11 personas han muerto y otras resultaron heridas en el intento.

HRW agrega que hay informaciones alarmantes de violaciones de los derechos humanos de los inmigrantes deportados desde España a Marruecos o detenidos en este país. Señala también que hay noticias que hablan de un uso excesivo de fuerza por parte de patrullas fronterizas españolas y marroquíes y explica que el 29 de septiembre cinco inmigrantes fueron asesinados, aparentemente por disparos, mientras un grupo de más de 500 personas trataba de superar la valla de separación de Ceuta con Marruecos.

"Dos cuerpos fueron hallados en territorio español y otros tres en el lado marroquí", indica HRW y agrega que otros seis hombres resultaron muertos el 5 de octubre en territorio marroquí por disparos de agentes policiales de este país.

Acusaciones de que funcionarios españoles y marroquíes estuvieron implicados en las muerte de inmigrantes son extremadamente graves, subraya Cartner y afirma que esos incidentes requieren una investigación internacional independiente.