Klose fue expulsado por una falta innecesaria en el mediocampo por el árbitro español Alberto Undiano, que mostró 11 rojas en 17 partidos en la temporada pasada en España. Podolski, por su parte, erró un penal que hubiera dejado empatado el partido.

"Poldi y Miro, mala suerte," titula el "Südkurier", mientras que el diaro de masas "Bild" los fustiga: "Eso fue estúpido, Klose" y "Eso fue de ciegos, Poldi".

Klose fue el máximo goleador del Mundial pasado, con cinco tantos, los mismos anotados en 2002 en Corea/Japón, pero ha pasado la mayor parte de la temporada pasada como suplente en el banco del Bayern Múnich.

Podolski también ha tenido una temporada muy floja en el Colonia, pero el técnico, Joachim Löw, les dio a ambos un nuevo voto de confianza por sus méritos pasados, que los jugadores devolvieron con una impecable actuación en el 4-0 contra Australia con el que debutó Alemania en el Mundial.

"(Klose) Llegó a Sudáfrica tocado a nivel mental después de una temporada floja en la Bundesliga. El gol contra Australia fue un paño de alivio, pero la herida no ha cicatrizado", estima en un editorial el prestigioso "Frankfurter Allgemeine Zeitung".

La buena forma exhibida en cambio por el atacante del Stuttgart Cacau, que probablemente reemplazará a Klose en el último partido de la fase de grupos contra Ghana, lleva al diario a preguntarse incluso si Klose volverá después al once titular germano.

El equipo alemán cerró filas detrás de Klose, y sólo se oyeron tibias críticas a Podolski por la ejecución del penal.

Sin embargo, más de un observador se preguntó por qué la elección recayó en Podolski y no en Bastian Schweinsteiger, que convirtió dos penales en un amistoso premundialista contra Bosnia.

"Löw tiene que darse cuenta de que fue un error dejar que el jugador del Colonia ejecutase el penal. Podolski había errado poco antes dos grandes oportunidades de marcar goles, una situación que no era ideal para asumir tal responsabilidad", afirma el "Frankfurter Allgemeine Zeitung".

dpa
Editor: Pablo Kummetz