Después de tres meses de pausa el delantero Lukas Podolski está a punto de volver a las canchas; en una amarga jugada del destino el rival a enfrentar en su regreso es el Colonia, el equipo de sus amores.

Lukas Podolski es hoy por hoy el más nuevo símbolo de Colonia; después de la histórica Catedral gótica y la celebración del Carnaval, el futbolista ha conseguido unir en torno suyo la identidad de toda una ciudad que desbordó de alegría al conocer recientemente que su hijo prodigo retorna a casa el próximo verano luego de 3 años de sufrimiento en tierra ajena, en Múnich, en las filas del Bayern.

Triste regreso

El atacante dejó claro esta semana que tener de contrincante a su ex club, que es al mismo tiempo su próximo club y el único al que le ha entregado el corazón, "hace que el partido no sea normal", y anunció, sin ocultar quien es el dueño de su cariño, "si me toca entrar quizás no celebre tan efusivamente como contra otros rivales".

El mejor ejemplo de a qué se refiere con sus palabras lo dio Podolski en la primera ronda del campeonato, cuando el mismo partido se escenificó en Colonia. En aquel entonces, el 13 de septiembre del 2008, el estadio coreó al unísono el nombre del delantero y cuando éste ingresó al partido, en el minuto 57, las tribunas enloquecieron y la historia del fútbol registró un hecho inusual: la afición celebró cada vez que el delantero rival tomaba el balón.

Pero lo más diciente aún estaba por venir: en el minuto 90 + 1, cuando Podolski anotó el tercer gol para el Bayern (que ganó 3-0), se negó a celebrar; al termino del partido dio una vuelta olímpica y se acercó a las tribunas del estadio de Colonia a firmar autógrafos y tomarse fotos con la afición.

Esta vez la historia será distinta en el Allianz Arena: "Poldi", tras conocerse su traspaso, es casi otro jugador del Colonia en el uniforme del rival, y el cuerpo técnico y las directivas del Bayern no van a tolerar un desaire en su casa, así el delantero diga que en sus últimos meses en Múnich va a "a intentar darlo todo de mí, quizás al final de la temporada se consigue uno que otro titulo, y entonces, a partir del verano, me concentraré en el Colonia".

Alternativa obligada

Sin embargo, pese a que Podolski sostiene estar en forma, aún no es claro si el entrenador Jürgen Klinsmann -con quien tiene una tensa relación como él mismo deja entrever- lo convocará para el partido contra el Colonia, ya que en las últimas semanas no lo ha tenido en cuenta ni siquiera para sentarlo en el banco.

El entrenador del Bayern quizás se vea obligado a recurrir a Podolski como alternativa de ataque tras conocerse que los dos delanteros titulares -Luca Toni y Miroslav Klose- están lesionados y uno de ellos, cuando no los dos, deberá hacer una pausa este sábado para estar en forma con miras al importante compromiso de Champions League que se avecina.

"Eso es algo que no puedo descartar" dijo Klinsmann sobre una posible alineación de Podolski, quien anunció que quiere jugar pero también agregó "si el entrenador no me pone en la lista eso tampoco es el fin del mundo".