Coronavirus: por qué se habla ahora de una “sindemia”
13 de octubre de 2020
A diferencia de una pandemia, el término sindemia hace referencia a la interacción entre dos enfermedades. Cada vez más científicos piden una respuesta más amplia a la crisis del COVID-19.
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Una epidemia tiene lugar cuando aumenta de forma inusual el número de casos de una enfermedad en concreto en una población y período de tiempo determinados. Un ejemplo de ello es la gripe estacional, que suele extenderse durante los meses de invierno.
Cuando este brote epidémico se extiende a varios países, continentes o se propaga a nivel global, entonces es cuando se habla de una pandemia. Por eso la Organización Mundial de la Salud declaróla emergencia sanitaria del nuevo coronavirus como pandemia el pasado 11 de marzo al haberse propagado mundialmente.
En los últimos días, sin embargo, cada vez son más las voces científicas que insisten en hablar de un tercer término: la sindemia. De acuerdo con Richard Horton, editor jefe de la revista médica The Lancet, se habla de sindemia cuando "dos o más enfermedades interactúan de forma tal que causan un daño mayor que la mera suma de estas dos enfermedades”.
Se trata, en otras palabras, de la sinergia entre dos o más epidemias que tienen lugar en una geografía y un tiempo determinados y que comparten factores sociales, con las consecuencias que de ello se derivan.
Hablamos pues de condicionantes sociales y ambientales que hacen que cientos segmentos de la población sean más vulnerables al impacto de esta interacción, de acuerdo con estos científicos.
"Estamos adoptando un enfoque demasiado estrecho para manejar este brote de. un nuevo coronavirus”, ha criticado Horton. "Todas nuestras intervenciones se han centrado en cortar las líneas de transmisión viral”.
Según este investigador, la actual crisis sanitaria del COVID-19 es una sindemia porque interactúa con enfermedades no transmisibles como el cáncer, la diabetes o las patologías cardíacas, todo ello en un contexto de desigualdad socioeconómica.
Medidas antipandemia: ¿Cuánta distancia física es suficiente?
El distanciamiento físico evita infecciones. Pero las reglas de distancia no tienen en cuenta todos los factores de la propagación del coronavirus, dicen ahora investigadores británicos. ¿Cuáles son las alternativas?
Imagen: picture-alliance/dpa/B. Wüstneck
¡Mantén la distancia, por favor!
Estas son las reglas contra el coronavirus tal como las conocemos: mantener una distancia de 1,5 a 2 metros de los demás, observar una buena higiene y usar mascarilla. Pero esto no tiene en cuenta la compleja realidad de cómo se propagan los aerosoles, según los investigadores de Oxford, Londres y Cambridge MA (EE.UU.)que publicaron los resultados de un estudio en el British Medical Journal.
Imagen: picture-alliance/dpa/J. Büttner
¿Tanto? ¿O más?
El Primer ministro británico Boris Johnson trata de hacer una demostración. Pero, ¿qué significa exactamente su gesto? ¿Tienen que estar las puntas de sus dedos a un metro y medio de las puntas de los dedos de la otra persona? Esa sería una interpretación razonable de la regla. Pero ya solo dos brazos miden cerca de 1,5 metros, por lo que podrían resultar fácilmente distancias mayores.
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¿Basta una distancia de una oveja o dos?
La Asociación Islandesa de Criadores de Ovejas ha establecido sus propias reglas: dos longitudes de oveja son apropiadas para evitar la infección. Es válido preguntarse si las mascarillas también deben ser tejidas con lana de oveja real. Este joven pastor en Senegal puede estar tratando de averiguar la longitud de una oveja tirando de su pata trasera. Los islandeses ya saben la respuesta: 1 metro.
Imagen: AFP/J. Wessels
Espaciadores naturales
Por supuesto, esto también podría funcionar. La longitud estándar de la correa de un perro corresponde exactamente a las reglas actuales del coronavirus. ¿Podría ser una coincidencia que una correa de dos metros se prescriba normalmente para lugares donde las correas son obligatorias?
Imagen: picture-alliance/chromorange
¿De dónde viene la regla de los 2 metros?
El equipo de Lydia Bourouiba, experta en dinámica de fluidos y transmisión de enfermedades en el MIT, afirma que la regla es obsoleta. Dos metros era la distancia recomendada por el médico alemán C. Flügge en 1897. Las gotitas que había atrapado a esa distancia aún eran contagiosas. Un estudio de 1948 demostró que el 90% de los estreptococos tosidos en las gotas no volaban más allá de 1,7 metros.
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Dos metros no son suficientes
El estudio de 1948 se publicó en el American Medical Journal y mostró que el 10% de los estreptococos volaban mucho más lejos: hasta 2,9 metros. Si ese fuera el caso, tal vez la gente en este prado a orillas del Rin en Düsseldorf estaría a salvo, si cada segundo círculo quedara libre. Pero espere un momento: aquí no se trata de estreptococos - que son bacterias -, sino de virus.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Becker
Los virus de la gripe y el coronavirus se propagan a través de aerosoles
Los virus son mucho más pequeños que las bacterias, por lo que pueden flotar durante horas. Por eso los investigadores recomiendan que la distancia entre las personas no sea el único criterio de seguridad, sino que se consideren también otros factores: buena ventilación de una habitación, que las personas lleven mascarilla y sean silenciosas, y si hablan, cantan o gritan que lo hagan suavemente.
Imagen: picture-alliance/dpa/Bayerischer Rundfunk
No cantar ni toser
Numerosos estudios recientes también han demostrado que la tos puede propulsar verdaderas cargas de virus hasta 8 metros a través del aire. Hablar o cantar en voz alta también esparce muchos aerosoles y gotitas por la habitación. Sin embargo, si la gente sólo habla en voz baja, como en una biblioteca, y se sienta al aire libre, las distancias de seguridad pueden volver a ser menores.
Imagen: Getty Images/AFP/A. McBride
¿Cuánto tiempo puedo permanecer en una habitación?
El tiempo en una habitación contaminada y el número de personas que se encuentren en ella son también factores decisivos para evaluar el riesgo de infección. Esos factores fueron tenidos en cuenta en un modelo de semáforo: en habitaciones con una alta ocupación, generalmente se debe permanecer solo por un corto tiempo, asegurarse de que estén bien ventiladas, usar mascarilla y hablar en voz baja.
Imagen: picture-alliance/dpa/S. Hoppe
En cubierta no se necesita mascarilla
Aquí, sin embargo, el semáforo del equipo de investigación británico-estadounidense estaría en verde. Afuera, la gente puede estar segura por largos períodos de tiempo incluso sin protección, siempre que haya poca gente alrededor, todo esté bien ventilado y nadie hable mucho. Pero aún así, ¿será suficiente la distancia entre las sillas aquí?