Primer abandono en candidatura papal
11 de abril de 2005Publicidad
El mundo occidental "no está aún maduro para un papa negro", dijo Arinze al diario italiano "La Repubblica". Un papa africano sería un desafío para la Iglesia, el mundo y los medios de comunicación.
A favor de un papa de color se había pronunciado, entre otros prelados, Desmond Tutu, el arzobispo anglicano de Sudáfrica. A Arinze se le daban posibilidades, como único africano, de ser elegido sucesor de Juan Pablo II. Arinze, de 72 años, se ocupa en el Vaticano del orden de la eucaristía y los sacramentos. Además fue durante 20 años especialista en relaciones con el Islam: una cuestión de la que deberá ocuparse también el próximo Papa.