Primer cementerio privado de Alemania
5 de mayo de 2006Alemania ya tiene su primer cementerio privado en la ciudad de Bergisch Gladbach. Cada uno puede elegir, dónde quiere ser enterrado, la hora, el día, las exequias, pero todo tiene sus bemoles: sólo se pueden enterrar urnas, y tampoco habrá fosas anónimas.
"Academia del Luto"
Fritz Roht es de profesión enterrador y trabaja en la "Academia del Luto". Su cementerio es un parque de 30.000 m² con esculturas, obras de arte y, en el medio, un riachuelo. Con este nuevo concepto, el emprededor sepulturero quiere introducir nuevos rituales. El cementerio se convierte en un lugar de experiencias emotivas, con vida, de meditación y recuerdo.
Este parque no tiene puertas ni horarios de visita. Roth permite a los parientes llevarse a sus "muertos" a casa todo el tiempo que quieran, hecho que roza la ilegalidad, pero considera que cada ser humano necesita su tiempo para despedirse de sus difuntos.
Diseño original
Los parientes deciden el diseño de las tumbas. En la actualidad ya hay 40 enterrados. Algunas sepulturas pasan inadvertidas, otras son un mar de flores. Roth, experto en marketing, reconoce que todo tiene un precio; por la sepultura de las urnas, 300 euros, pero al lado de un árbol, 850 euros.
¿La pregunta es qué pasará con las urnas si la empresa de Roth quiebra? Posiblemente el municipio se encargará de asegurar la paz de los difuntos.