El nominado como secretario del Ejército renuncia antes incluso de tomar posesión del puesto por incompatibilidad debido al conflicto de intereses con sus millonarios negocios empresariales.
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El multimillonario Vincent Viola, elegido por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como secretario del Ejército, renunció este viernes (03.02.2017) al cargo antes incluso de haberlo asumido. En un comunicado, Viola aduce "que no podrá aceptar la nominación como secretario del Ejército ya que los obstáculos de separar las empresas que ha construido durante los últimos 35 años han resultado insalvables".
El cargo es un puesto civil con responsabilidad legal en todas las cuestiones relacionadas con el Ejército y que depende del Pentágono, liderado por el general James "Perro Loco" Mattis, quien según medios locales estaba descontento con la elección de Viola. En otro comunicado del Departamento de Defensa, Mattis ha dicho estar decepcionado con la decisión de Viola, pero que la entiende y respeta
Vincent Viola, de 60 años e hijo de inmigrantes italianos, es un empresario neoyorquino. Es dueño también del equipo de hockey sobre hielo Panthers de Florida; preside Virtu Financial, una de las empresas más grandes de comercio electrónico, y participa de la aerolínea Eastern Air Lines. Su fortuna, según The New York Times, asciende a 1.800 millones de dólares.
Viola tiene una fuerte vinculación con el mundo militar, ya que se graduó en la prestigiosa academia castrense de West Point y ha dedicado parte de su trayectoria empresarial y de sus obras benéficas a esa área. Fue zapador de infantería y perteneció a la División Aerotransportada 101.
LGC (EFE/AP)
Los primeros 10 días de la Era Trump
DW sigue paso a paso la huella de una administración que desde sus inicios ha causado polémica y el surgimiento de movimientos ciudadanos de resistencia tanto en Estados Unidos como en otros países.
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Toma de posesión (20.01.2017)
Donald Trump juramentó el 20 de enero de 2017 como presidente número 45 en la historia de Estados Unidos. Como candidato prometió realizar profundos cambios en cuanto a las políticas de salud, migratoria y exterior. Daba fin así la era Obama y comenzaba otra muy distinta.
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Primera orden ejecutiva (23.01.2017)
Apenas instalado en la Casa Blanca, Trump comenzó a dar muestras de que no perdería tiempo en llevar a cabo sus promesas de campaña. Su instrumento favorito son las órdenes ejecutivas. En la primera de su administración, Trump anunció el 23 de enero de 2017 la salida de Estados Unidos del Tratado Transpacífico, uno de los de mayor envergadura en el proyecto de comercio multilateral global.
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Resurrección de oleoductos (24.01.2017)
Al día siguiente, Trump firmó otra orden ejecutiva, esta para reactivar los proyectos de los oleoductos Keystone XL y Dakota Access, que habían sido suspendidos por Barack Obama. La medida tuvo inmediatamente una repercusión positiva en Canadá, socio de Estados Unidos en el proyecto. Pero organizaciones ambientalistas y comunidades autóctonas criticaron la medida de Trump y anunciaron resistencia.
Imagen: Reuters/K. Lamarque
Muro por decreto (25.01.2017)
El 25 de enero de 2017, Donald Trump firmó el decreto que ordenaba iniciar la construcción de un muro en la frontera con México. Lo hizo mientras dos funcionarios mexicanos se encontraban en la Casa Blanca para hablar sobre una posible renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Trump causó indignación en México, pero no se inmutó.
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Reacción de México
El gobierno de México reaccionó con declaraciones. El presidente Enrique Peña Nieto insistió en que México no pagaría por la construcción del muro fronterizo y dijo que esperaría el reporte de los dos funcionarios presentes en Washington para definir estrategias y acciones. Intelectuales y políticos le pidieron acciones prontas.
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Trump toma la iniciativa
Peña Nieto y su ministro de Exteriores, Luis Videgaray (der.) fueron rebasados por Trump. El presidente de EE.UU. dijo el 26 de enero de 2017 que si México insistía en no pagar el muro, era mejor cancelar el encuentro programado para el 31 de enero entre ambos mandatarios. Como reacción, Peña Nieto canceló su viaje a Washington.
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Limitación de visados y entradas a EE.UU.
Trump firmó el 27 de enero de 2017 una orden ejecutiva más, que limitaba el acceso a Estados Unidos, entre otros, a ciudadanos estadounidenses que contaran además con la nacionalidad de siete países de mayoría musulmana, entre ellos Irak y Siria. La medida provocó repudio internacional aunque la Casa Blanca insistió en que no se trataba de una medida determinada por cuestiones religiosas.
Como respuesta, miles de personas acudieron a puertos aéreos donde agentes migratorios rechazaban la entrada de ciudadanos procedentes de los siete países mencionados en la orden ejecutiva de Trump. La norma no clarificaba asuntos legales importantes en su implementación, por lo que comenzó a ser aplicada en un entorno de caos jurídico.
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Impugnación legal
La fiscal general interina de Estados Unidos, Sally Yates, impugnó la orden ejecutiva sobre inmigración por considerarla "ilegal". Horas después, Trump ordenó el 31 de enero de 2017 su emoción y calificó a Yates como traidora por no cumplir la orden ejecutiva.