Con su llamado a prohibir el ingreso a la Unión Europea (UE) a ciudadanos rusos, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, desató un polémico debate. Finlandia, Polonia, la República Checa y los países bálticos suspendieron a corto plazo la emisión de visas. Alemania, Grecia, Chipre y la Comisión Europea (CE) son escépticos y rechazan una prohibición de viaje para los rusos. El canciller alemán, Olaf Scholz, dijo la semana pasada que esta es una guerra del presidente ruso, Vladimir Putin, y por eso le resulta difícil aceptar una prohibición de viaje que también afectaría a personas inocentes.

La presidencia checa de la CE colocó el debate sobre las visas en el orden del día del encuentro informal de ministros de Exteriores de la UE de este martes (29.08.2022) en Praga. Se espera que al menos un acuerdo de simplificación de visas con Rusia, vigente desde 2007, pueda ser desechado. Así lo confirmaron fuentes diplomáticas al diario Financial Times. Una suspensión del acuerdo de visado encarecería y complicaría la solicitud de un visado de corta duración para el espacio Schengen.

No se prevé una resolución de sanción a favor de una prohibición total de ingreso, y tampoco una decisión de ese tipo en solitario de algunos países miembros, ya que un visado de turista para personas rusas es válido en los 26 países de la zona de Schengen, independientemente de qué país lo haya emitido.

¿Cuán grande es el problema?

Según la agencia fronteriza europea Frontex, desde el inicio de la guerra en Ucrania, se registraron casi un millón de ingresos de personas con pasaporte ruso en la UE. La mayoría entró a través de Finlandia, Estonia y Lituania. Pero se trata de turistas que llegan por pocos días. No se emitieron un millón de visas, ya que los rusos pueden entrar y salir varias veces de la zona Schengen con un visado turístico de 90 días.

La alta cifra de ingresos a la UE por tierra se explica porque ya no hay vuelos directos entre Rusia y el bloque comunitario. Por lo tanto, países como Alemania o Francia son mucho más difíciles de alcanzar. Según el Ministerio de Exteriores alemán, los consulados de Alemania en Rusia emitieron alrededor de 14.000 visas de corto plazo en la primera mitad del año.

Grandes contingentes de turistas de Rusia se han registrado en Grecia y Chipre. Una cuarta parte de todos los turistas que viajaron a Chipre este año llegaron desde Rusia. Montenegro, país candidato a ingresar a la UE, y también un destino popular de muchos rusos, recibe ahora muchos menos turistas. Turquía, aunque es miembro de la OTAN y candidato para adherirse al bloque, no apoya las sanciones occidentales contra Rusia, pero continúa permitiendo que los rusos ingresen al país sin visa.

¿Qué restricciones existen ya?

Además de Estonia, Lituania, Letonia, Finlandia, Polonia y la República Checa, Dinamarca también quiere restringir la emisión de visas. Según el servicio de emisión de visas "Fragomen", los Países Bajos, Bélgica, España y Rumania también han reducido significativamente este servicio. Muchos estados han reducido considerablemente sus consulados o embajadas en Rusia, lo que dificulta mucho la visita en persona para una cita de solicitud de visado.

¿Qué pueden hacer los ministros de Exteriores europeos?

Ralph Bossong, experto en Migración de la Fundación Ciencia y Política (SWP), en Berlín, recomienda una mejor coordinación y una disminución de la emisión de visas, no a través de prohibiciones, sino aprovechando las normas vigentes. "Para compensar, abrimos otras vías, ya sean visas humanitarias o visas para migración laboral, o similares", dice.

¿Qué exigen los parlamentarios de la UE?

En una carta abierta al jefe de política exterior de la UE, Josep Borrell, los eurodiputados pidieron restricciones de visa y una prohibición total de viajar para al menos 6.000 miembros de la élite gobernante de Rusia.

¿Qué están haciendo otros Estados?

Estados Unidos ha dejado de emitir visas de corto plazo en Rusia. Las solicitudes ahora se pueden hacer en la embajada en la capital polaca, Varsovia, si los rusos logran llegar allí. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instó a los jóvenes científicos, empresarios y grandes triunfadores rusos a abandonar su país en guerra. Esta "fuga de cerebros" se promoverá con la generosa concesión de permisos de residencia de larga duración.

Por su parte, el Reino Unido no quiere imponer una prohibición general de viajar a los rusos, pero sí quiere limitar severamente la emisión de visas, dijo el ministro de Defensa, Ben Wallace, en una entrevista.

(cp/rml)