Prosigue con lentitud la evacuación en el este de Alepo
16 de diciembre de 2016
La evacuación de personas de los barrios asediados del este de la ciudad siria de Alepo (norte) continúa hoy, tras la salida de miles desde el inicio de la operación el jueves, según medios oficiales y activistas.
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Miles de personas esperan bajo temperaturas invernales para ser evacuadas del este de la ciudad siria de Alepo en el segundo día de la operación, pero no llegan suficientes autobuses, aseguró este viernes (16.12.2016) a la agencia dpa un portavoz de la organización de ayuda "Cascos Blancos", Ibrahim al Haj.
"Estoy aquí ahora. Los autobuses han dejado de llegar... La gente está exhausta y con miedo de que el alto el fuego vuelva a romperse", dijo a su vez un activista que sigue en el reducto de la ciudad hasta ahora en manos de los rebeldes.
El Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, con sede en Londres, indicó que los autobuses han hecho varios viajes desde que comenzó la evacuación el jueves.
"La operación continuó durante la noche y sigue en marcha. Es muy difícil saber cuánta gente ha sido evacuada porque el número de autobuses y ambulancias va cambiando", señaló la portavoz de la Cruz Roja Ingy Sedky.
Cifras de combatientes y civiles
La agencia rusa Tass afirmó que han sido evacuados en las últimas 24 horas 6.462 personas, entre ellos más de 3.000 combatientes y 301 heridos. Una fuente militar siria indicó, por su parte, que la cifra total de personas que han abandonado el este de Alepo es de 8.079, de los que 3.475 eran milicianos.
Por otra parte, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos confirmó que hasta el momento han salido diez grupos con 8.500 heridos, enfermos, civiles y combatientes del este de Alepo, en dirección al oeste.
La ONG precisó que 3.000 de los evacuados son rebeldes y unos 360 son heridos y enfermos.
Difícil salida de Idleb
Entretanto, la ONG señaló que ningún enfermo o herido ha salido de los pueblos de mayoría chií de Fua y Kefraya, situados en la vecina provincia de Idleb y rodeados por el Frente de la Conquista del Levante (filial siria de Al Qaeda).
Ayer, un convoy de ambulancias se dirigió a esas dos localidades para facilitar la evacuación, que todavía no se ha producido.
La salida de los pacientes de las dos ciudades forma parte del acuerdo de evacuación de Alepo, ya que fue una de las condiciones impuestas por Irán, aliado del Gobierno de Damasco, para permitir la marcha de rebeldes y civiles de la mayor ciudad del norte de Siria.
CP (efe, rtr)
La cruenta batalla de Alepo
La ciudad, antaño eje comercial sirio, se ha convertido en un descampado donde aún habitan miles de personas sometidas a los avatares de una guerra sanguinaria.
Imagen: Getty Images/AFP/G. Ourfalian
Al comienzo fueron protestas pacíficas
Como en muchas otras ciudades de Siria, en Alepo el malestar ciudadano por la conducción del país estalló a comienzos de 2011. Numerosas protestas contra el régimen de Bashar al Assad y las violaciones a los derechos humanos, además del desgaste de un liderazgo cuestionado, propiciaron el escenario perfecto para un alzamiento popular.
Imagen: dapd
Primeros ataques armados
Esta imagen de la localidad de Homs muestra los efectos de los primeros ataques contra las fuerzas del Gobierno en el país. En Alepo, a comienzos de febrero de 2012, 28 personas perdieron la vida en escaramuzas con artillería entre fuerzas rebeldes, aún mal organizadas, y las tropas del Ejército de Siria.
Imagen: Reuters
La metamorfosis
En esta imagen, civiles y uniformados protestan contra Al Assad. Los uniformados son miembros del Ejército Libre de Siria, agrupación rebelde conformada por soldados desertores del Ejército sirio. Las banderas que flamean no son las del país, sino las de la oposición. Lentamente se monta el escenario para la dura guerra civil que marcará al país por los próximos años.
Imagen: Reuters
Surgen las armas
Soldados del Ejército Libre de Siria patrullan en el barrio de Salahadin, uno de los primeros de Alepo en caer en manos de las fuerzas rebeldes. La imagen es de agosto de 2012. Lentamente el Gobierno de Al Assad comenzaba a perder el control sobre el territorio de la mayor ciudad de Siria. Al mismo tiempo, los insurgentes lanzaban ofensivas contra Damasco.
Imagen: Reuters
Ayuda internacional
Apremiado por la situación interna, el presidente Bashar al Assad comenzó a buscar ayuda en el exterior. Los primeros en acudir a su lado fueron los iraníes. En la imagen, el entonces ministro de Exteriores persa, Ali Akbar Salehi, saluda al mandatario sirio en Damasco. Irán ha aportado tropas y asesores militares, vitales para la recuperación del Ejército de Siria.
Imagen: Reuters
Momento de tranquilidad
Desde el comienzo oficial de la llamada "Batalla de Alepo", el 19 de julio de 2012 tras una ofensiva rebelde, ha habido sucesivos remansos de paz. Como éste, declarado por un día de celebración musulmán a fines de octubre de 2012, aprovechado por la gente para comprar comida en el norte de la ciudad.
Imagen: AFP/Getty Images
Cascos blancos recuerdan a sus colegas
Ante la falta de organizaciones "oficiales", Alepo ha debido reconstruir sus instituciones. Una de las más conocidas es la de los "cascos blancos", voluntarios que rescatan a las víctimas de los bombardeos y cuyo nombre llegó a sonar como candidato al Premio Nobel de la Paz. En la imagen, recuerdan a sus miembros caídos en cumplimiento del deber.
Imagen: Reuters
Caos, terreno fértil
El caos en el que se ha visto sumido el país, especialmente Alepo, ha sido caldo de cultivo para que tomen fuerza distintos grupos armados. El más conocido es Estado Islámico, que lucha contra el Ejército de Siria y contra los rebeldes. Otros grupos son el Ejército Libre de Siria, el Frente al Nusra y las fuerzas kurdas.
Imagen: picture alliance/ZUMA Press/M. Dairieh
Víctimas inocentes
Como siempre en la guerra, los niños son los más afectados. Los bombardeos incesantes, primero de la aviación siria y luego de la rusa, han reducido la ciudad a escombros, muchas veces con sus habitantes dentro. Esta imagen, icónica por lo cruda, es la del niño Omran Daqneesh, de cinco años, herido tras un ataque ruso.
Imagen: picture-alliance/AA/M. Rslan
Con una ayuda de mis amigos
Rusia apoya desde septiembre de 2015 a las tropas de Al Assad, marcando un giro en la guerra. Desde entonces, el Ejército avanza sobre las zonas rebeldes. Esos triunfos han sido a costa de la ciudad y sus vecinos, que ahora viven en un cementerio de edificios. Pero, pese a la adversidad, siempre habrá un minuto de inocencia, para tomarse un respiro y jugar. Aunque sea en medio de la destrucción.