Un manifestante y un policía murieron en Turquía en los enfrentamientos que se produjeron tras el funeral de un joven de 15 años que se ha convertido en el símbolo de las protestas antigubernamentales, informan este jueves medios locales.

El manifestante, de 22 años, murió en Estambul por una herida en la cabeza. Por su parte, el policía falleció de un ataque al corazón en la provincia este de Tunceli tras verse expuesto a gran cantidad de gas lacrimógeno.

La policía usó gas lacrimógeno, balas de goma y cañones de agua para dispersar las protestas el miércoles en Estambul, donde decenas de miles de personas se reunieron para el funeral de Berkin Elvan, el menor que murió tras pasar nueve meses en coma al ser golpeado con una granada de gas lacrimógeno el año pasado.

Los enfrentamientos duraron hasta bien entrada la noche. Los opositores llamaban "asesino" al primer ministro Recep Tayyip Erdogan y exigían su renuncia. No hubo incidentes en otras ciudades.

Las protestas ponen bajo presión a Erdogan y su Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) de cara a las elecciones de finales de este mes.

E(dpa, efe)