Reconocimiento de títulos para inmigrantes
11 de diciembre de 2009
Los pasajeros de taxi en Alemania a menudo se sorprenden del nivel cultural de algunos conductores. Más grande aún es la sorpresa de ser llevado a destino por un profesor tunecino, un arqueólogo turco o un ingeniero pakistaní si se tiene en cuenta que la economía alemana se lamenta hace años de la falta de especialistas y concibe complicadas regulaciones para que puedan quedarse en el país. Muchos de los especialistas ya están viviendo en Alemania, pero no les queda otro remedio que dejar de poner en práctica su potencial para poder ganar su sustento.
Potencial inutilizado
Alrededor de tres millones de los inmigrantes que viven en Alemania poseen un título académico o profesional, de los cuales medio millón no es reconocido, según expertos. El gobierno germano no puede y no quiere dejar desaprovechado semejante potencial de conocimientos y experiencia. “A causa del desarrollo demográfico dependemos de especialistas del extranjero”, dijo la ministra de Educación, Annette Schavan, quien quiere facilitar a los inmigrantes el reconocimiento de sus diplomas en Alemania.
“Se trata de un paso importantísimo para la integración”, concuerda la Encargada de Integración del Gobierno federal, Maria Böhmer. “Es hora de que una médica de Ucrania no tenga que trabajar como asistente geriátrica, sino en su profesión”, dice Böhmer. Y lo mismo vale para los ingenieros, además de otras profesiones.
Transparencia en lugar de confusión burocrática
El gabinete germano ha presentado algunas propuestas importantes para mejorar la situación. “Queremos lograr una normativa válida para todo el territorio alemán hasta el 1º de enero de 2011”, explica Annette Schavan. “El objetivo es crear una exigencia de legalidad para todas las calificaciones obtenidas en el extranjero”, señala. Hasta ahora, sólo los expatriados y los ciudadanos de la Unión Europea tienen derecho a que se compruebe la validez de sus títulos, y eso aún no rige para todos los diplomas.
En 2011 también la búsqueda interminable de instituciones que se hagan cargo de la revalidación pasaría a ser cosa del pasado. Según expertos, para el proceso de reconocimiento de títulos existen cerca de 300 diferentes organismos: agencias, institutos y cámaras de comercio, entro otras. “Hasta ahora, el procedimiento es muy confuso para el solicitante”, opina Hubert Schöffmann, director general del área Formación Profesional de la Cámara de Industria y Comercio de Múnich. Schöffmann se alegra de la futura creación e implementación de una regulación única.
La ministra de educación alemana espera que sólo sea una oficina central la que informe al postulante los pasos a seguir, tanto a los que viven en Alemania como a aquellos que planean emigrar. El objetivo es que obtengan información sobre el valor que sus diplomas o estudios tienen en Alemania, si los habilita a trabajar del mismo modo que un título alemán, o si tienen que hacer cursos adicionales.
Los títulos alemanes siguen teniendo valor
Es claro que se producirá una que otra desilusión. “Debido alto nivel educativo existente en Alemania puede suceder que un ingeniero extranjero deba reconocer que su formación corresponde aquí a la de un técnico”, señala Maria Böhmer.
Sin embargo, el proyecto de ley prevé en ciertos casos un reconocimiento parcial que le permitiría al ingeniero trabajar como técnico. Pero el gobierno del Partido Liberal no planea otorgar ayuda financiera para estudios de perfeccionamiento, como exige el opositor Partido Socialdemócrata (SPD).
El caso es que, si un título es reconocido, no significa que esté al mismo nivel que un título obtenido en Alemania. “Se pondrá atención en no desvalorizar el sistema de formación profesional alemán”, remarcó Annette Schavan. Como ejemplo, los exámenes de maestría para oficios como la carpintería o la electromecánica seguirán dependiendo de los gremios correspondientes.
Autor: Heiner Kiesel/ Cristina Papaleo
Editor: José Ospina