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Prueba de confianza a Bush

Eva Usi4 de noviembre de 2004

George W. Bush logró un segundo mandato con una clara mayoría de votos. El hombre que dividió al país como ninguno de sus predecesores, obtuvo una abrumadora prueba de confianza de sus conciudadanos.

La población confía en que Bush es más capaz que Kerry en la conducción del país.Imagen: AP

Ante miles de simpatizantes en Washington, Bush calificó el desenlace electoral como una victoria histórica. „El país ha hablado y me siento humilde ante la prueba de confianza de mis conciudadanos“, dijo. El presidente estadounidense se dirigió a quienes votaron por su oponente y los exhortó a que le dieran su apoyo. El abrumador resultado a favor de Bush sorprendió a sus simpatizantes. Los comicios registraron un índice récord de participación y dieron al presidente en funciones el mayor número de votos de la historia de Estados Unidos.

Bush señaló que su gobierno seguirá respaldando las democracias incipientes en Irak y Afganistán sin olvidar los valores de la familia y la fe religiosa en la política nacional. Previamente, el vicepresidente Dick Cheney destacó que el país dio un mandato con una clara victoria además de una ampliación de la mayoría republicana en las dos cámaras del Congreso.

Votos inesperados

Local electoral en Ohio.

Además de los votos de sus fieles, Bush logró su reelección con el respaldo del voto femenino, de las minorías étnicas e incluso los ateos. Según los análisis de voto, Bush logró movilizar más a las bases de su partido que su rival, John Kerry, pero también arrebató el voto de colectivos que no lo apoyaron hace cuatro años. El 42% de los hispanos -tradicionalmente bastión demócrata- votó por Bush, una cifra que ningún republicano había obtenido antes. Esto se vio claramente en Texas y Florida, donde el voto hispano fue determinante. Bush arrasó en Florida. Protestantes, católicos y judíos también incrementaron su apoyo al inquilino de la Casa Blanca, pero lo más notable es que logró movilizar, con un 25% de aumento de votos, a los ciudadanos que nunca van a la iglesia. El apoyo de otros grupos no fue ninguna sorpresa, como el voto de los propietarios de armas, de los más adinerados y de los militares.

Casi 58,8 millones de ciudadanos votaron por Bush, lo que le dio una ventaja de más de tres millones de votos sobre el candidato demócrata. La lucha contra el terrorismo en el plano internacional y la defensa de los valores tradicionales, como la familia, y la oposición al aborto fueron los ejes de la campaña electoral del presidente.

Protestas contra la guerra en Irak en Londres.Imagen: AP

Un futuro incierto

Para sus críticos, tanto en Estados Unidos como en el exterior, la perspectiva de que Bush siga siendo el hombre más poderoso del mundo durante cuatro años más provoca un gran desaliento y el temor de que haya más guerras, de que aumente el desempleo, el déficit fiscal y sean eliminadas más prestaciones sociales.

La polarizada visión del presidente, que no distingue más que entre blanco y negro y bueno y malo, provoca también una división irreconciliable entre sus críticos y simpatizantes. Pese a todo, los resultados electorales muestran que la mayoría de los votantes confían más en las cualidades de Bush que en las de Kerry a la hora de enfrentar los grandes desafíos como la amenaza terrorista. Sus críticos dicen que es porque ha sabido capitalizar el miedo, y sus seguidores afirman que mucha de la gente que votó por el candidato demócrata lo hizo más por repudio a Bush que por apoyo a Kerry y ése no es un buen argumento para elegir un líder en tiempos turbulentos.