¿Puede el aceite de levadura salvar los bosques tropicales?
29 de agosto de 2020El aceite de palma es barato, abundante y extremadamente útil, pero su producción implica la destrucción de las selvas tropicales. Nuevas empresas trabajan por sustituir el aceite de palma por aceite de levadura. ¿Pueden superar el bajo precio del aceite de palma?
El aceite de palma es increíblemente útil. Es el aceite vegetal más utilizado en el mundo, porque tiene varias ventajas: primero, es el más barato. Unos 73 millones de toneladas métricas de aceite crudo de palma se vendieron a un precio medio al por mayor de 575 dólares por tonelada en 2019.
Los siguientes aceites vegetales más baratos son los de soja, girasol y colza. Los precios fluctúan, pero suelen estar entre un 15% y un 50% por encima que el del aceite de palma, y a veces casi el doble de su precio. En segundo lugar, "la compleja composición de ácidos grasos del aceite de palma lo hace extremadamente versátil", según Sophie Parsons, de la británica Universidad de Bath, que investiga el potencial de los aceites procedentes de cultivos de levadura para sustituir al aceite de palma.
Aproximadamente la mitad del "mesocarpio" o pulpa del fruto de la palma aceitera está hecha de ácidos grasos saturados que son sólidos a temperatura ambiente, ideales para su uso en aperitivos como pasteles y barras de caramelo, en la masa de la pizza, la margarina, el helado y mucho más, incluyendo artículos no alimentarios como los cosméticos. La otra mitad de los ácidos grasos del fruto del aceite de palma son líquidos a temperatura ambiente; el aceite de palma líquido se utiliza ampliamente como aceite de cocina en los países asiáticos.
Champú, el enemigo de los orangutanes
Desafortunadamente, como la palma de aceite solo puede crecer en los trópicos húmedos, la rápida expansión de sus plantaciones ha significado la pérdida de algunos de los bosques más antiguos, hermosos y ricos en vida silvestre del mundo. Alrededor del 85% del aceite de palma del mundo se produce en Indonesia y Malasia. La isla de Borneo, dividida entre Indonesia, Malasia y Brunei, es una región clave de biodiversidad que cuenta con elefantes pigmeos, leopardos nublados, aves de paraíso, orangutanes y cientos de otras raras especies de vida silvestre. Sin embargo, la isla también alberga 8,4 millones de hectáreas (20,7 millones de acres) de plantaciones de aceite de palma, alrededor del 45% del total mundial.
Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), "la producción de aceite de palma se multiplicó por 15 entre 1980 y 2014", es probable que a mediados de siglo se duplique o triplique la demanda y "la expansión de la palma de aceite podría afectar al 54% de los mamíferos amenazados y al 64% de las aves amenazadas en todo el mundo".
El aceite de palma es más barato también porque utiliza menos tierra por tonelada de aceite producido. Mientras que una hectárea de colza puede producir alrededor de una tonelada de aceite, una hectárea de palma aceitera rinde 4 o 5 toneladas. "Debido a que otros cultivos oleaginosos tienen un rendimiento menor [por hectárea] que la palma aceitera, reemplazarla no es una solución. Para reducir sus impactos en la biodiversidad, el aceite de palma debe ser producido de manera más sostenible evitando la deforestación y reduciendo el uso de aceite de palma no alimenticio", dijo la UICN en un informe reciente.
¿Se puede reemplazar el aceite de palma?
Pero el biólogo investigador Thomas Brück no está de acuerdo con la evaluación de la UICN. El jefe del grupo de investigación de biología sintética de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) y su compañero de investigación, Mahmoud Masri, dijeron a DW que hay una solución disponible. En una videoconferencia, mostraron a DW dos botellas: una estaba llena de un aceite líquido amarillento, la otra con una grasa vegetal sólida de color blanco lechoso. Los dos investigadores produjeron las sustancias en su laboratorio de Múnich cultivando "cepas naturales de levadura ricas en aceite en cubas de fermentación", y luego cosechando el aceite con un "proceso de bajo impacto y respetuoso con el medio ambiente".
"Las cepas de levadura pueden consumir casi toda materia orgánica, desde partes de madera o paja hasta residuos de comida de restaurante, e incluso algas marinas procesadas, por lo que el coste ecológico de la materia prima puede mantenerse muy bajo", explica Masri. El desafío ahora, dice, es desarrollar el equipo y los procesos para aumentar el tamaño de los lotes de cultivo de levadura a escala industrial.
Sophie Parsons también dice que varias cepas de cultivos de levadura rica en aceite pueden reemplazar cada uno de los componentes del aceite de palma con aceites muy similares. Esto se ha demostrado en numerosos experimentos de laboratorio, señala, pero la tecnología aún no está disponible a escala comercial. Piensa que es poco probable que sea posible alcanzar volúmenes de producción de aceite de levadura tan grandes como los del aceite de palma, es decir, del orden de 70 millones de toneladas al año. Además, dijo a DW que "no sucederá sin apoyo político", en forma de regulación de la Unión Europea o inversiones públicas que fomenten alternativas al aceite de palma.
Carrera por la comercialización
Parsons y Brück dicen que sería de gran ayuda si la Unión Europea aumentara el gasto público en el desarrollo de biorreactores. Brück estima que "unos 200 millones de euros" bastarían para llevar la tecnología para el cultivo de levaduras ricas en aceite a escala industrial.
En cualquier caso, la carrera hacia la comercialización ha comenzado. El grupo TUM ha formado una nueva empresa llamada Global Sustainability Transformation (GST), dirigida por Mahmoud Masri. Y en marzo de este año, Breakthrough Energy Partners (BEP), un fondo de capital de riesgo para tecnologías limpias cofinanciado por Bill Gates, invirtió 20 millones de dólares en una nueva empresa con sede en Nueva York, C16 Biosciences, cuyo objetivo es producir aceite de levadura en biorreactores comerciales.
(jov/er)