Javier Milei ganó en 20 de las 23 provincias de Argentina y en la capital, Buenos Aires, y muchos de sus votantes esperan un cambio tras 40 años de democracia y apoyan la dolarización para terminar con la inflación, pero otros argentinos temen una crisis más profunda y un ambiente social de violencia, así como un retroceso en materia de derechos humanos y memoria.