La Unión Europea se está endeudando como nunca antes a causa de la pandemia de COVID-19. ¿Es el momento para empezar a preocuparse? Según los expertos, la pandemia incrementará las deudas, aunque llaman a la calma.
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El Parlamento alemán aprobó un presupuesto suplementario para este 2021, elevando la nueva deuda fiscal para este año a la cifra récord de 240.000 millones de euros. Esta "valiente medida", como la calificó el ministro alemán de Hacienda, Olaf Scholz (SPD), pretende amortiguar las consecuencias económicas de la pandemia.
La deuda total de Alemania se eleva así también un máximo histórico. Pero Alemania no es el único: todos los Estados de la Unión Europea (UE) se endeudaron a causa de la pandemia, desde Finlandia hasta Grecia. El organismo europeo de estadística Eurostat informó que la tasa de endeudamiento de los estados europeos será casi del 100% este año. Y la tendencia va en aumento.
El Pacto de Estabilidad y Crecimiento queda en suspenso
La UE suspendió el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la Eurozona debido a la grave recesión, al menos hasta finales de año, según anunció el Comisario de Asuntos Económicos y Monetarios Paolo Gentiloni. Y probablemente seguirá siendo así el año que viene. La crisis se seguirá enfrentando con más deudas.
¿Cuánto tiempo puede durar esto? El tiempo que sea necesario. Esta es la opinión de Guntram Wolff, director del think tank de política económica "Bruegel", en Bruselas. "Creo que seguirá así por el momento. Tal y como veo la situación, las normas seguirán suspendidas el año que viene. Eso también tiene sentido mientras sigamos en una situación económica excepcional".
El crecimiento para salir de las deudas
El especialista no ve actualmente problemas para la estabilidad del euro. ¿Pero quién pagará las deudas? Según Wolff, la respuesta es sencilla: "El factor decisivo con las deudas altas es siempre la tasa de crecimiento. Si se consigue un mayor crecimiento, el problema de la deuda se soluciona solo. Las políticas de austeridad solo ayudan de forma muy limitada con deudas elevadas".
Así que ahorrar sirve de poco. Hay que crecer para salir de las deudas. Markus Ferber (CSU) está de acuerdo con esta hipótesis: "Por ahora no nos preocupa la estabilidad del Euro", dijo a DW el eurodiputado. Sin embargo, el político asegura que en algún momento se tendrá que volver a la senda de la estabilidad. Él considera que es importante volver a aplicar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento el año que viene.
Grecia se encamina a una tasa de deuda del 200 por ciento (con respecto al PIB). Italia, por su parte, a unabdel 180%. Si esto hubiera ocurrido antes de la crisis del coronavirus, todas las alarmas habrían sonado, pero ahora tanto Wolff como Ferber ven con tranquilidad la situación de Grecia porque el país se ha reestructurado bien en los últimos diez años.
"Actualmente tenemos una unión monetaria mucho más sólida. Tenemos un mecanismo de estabilidad en la eurozona, tenemos el nuevo fondo de reconstrucción de la UE, también tenemos una política monetaria que ha aprendido la lección", agregó Wolff.
Los miembros problemáticos: ¿Grecia o más bien Italia?
"De los 27 países de la UE, Grecia es el único que también vincula su plan de reconstrucción post-Corona a un programa de reformas. Me preocupa menos Grecia que otros países. Mi mayor preocupación, por decirlo claramente, es Italia", añadió Ferber. Si los tipos de interés suben o se produce una oleada de quiebras, el Estado y los bancos italianos podrían volver a tener problemas rápidamente. Mario Draghi, nuevo primer ministro de Italia y exjefe del Banco Central Europeo, apuesta por una política clara de crecimiento. Crecer para salir de la deuda.
Por su parte, la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, junto con sus colegas de todo el mundo, anima a los eurodiputados a mantener el rumbo: "Poner fin a las medidas demasiado pronto sería un error y nos llevaría a saltar por un precipicio".
(ju/er)
Distribución desigual: prosperidad en la Unión Europea
Las diferencias en la calidad de vida de los países de la Unión Europea son extremas. Sin embargo, aun midiendo la riqueza de esos países hay sorpresas, incluso en aquellos que están en crisis.
Imagen: DW
Bulgaria: bajos costos laborales, bajos ingresos
Bulgaria es considerado el miembro más pobre de la Unión Europea y donde la corrupción está más extendida. Según Germany Trade and Invest (GTAI), el ingreso bruto promedio en 2018 alcanzó apenas los 580 euros al mes. Desde su ingreso en la UE, muchos jóvenes le han dado la espalda al país, muchos de ellos con buena educación.
Imagen: BGNES
Rumania, en el penúltimo lugar del ránking económico de la UE
Un idilio engañoso. Muchos antiguos pueblos pintorescos de Transilvania han sido cuidadosamente restaurados, como en la ciudad de Brasov (foto). Con una producción económica de 11.440 euros per cápita (2019), Rumania está mejor posicionado que Bulgaria (8.680 euros). Según la Comisión de la UE, el salario bruto promedio en Rumania en 2019 fue alrededor de 1.050 euros. En Alemania, de 3.994 euros.
Imagen: Imago Images/Design Pics/R. Maschmeyer
Grecia salió de la crisis, pero volvió a entrar
El país se estaba recuperando recientemente de la crisis provocada por las deudas financieras. El turismo en particular había contribuido fuertemente a ello en los últimos años. Sin embargo, debido a la crisis ocasionada por el coronavirus, Grecia está de nuevo bajo presión y depende de la ayuda de la UE. La producción económica per cápita es de 17.500 euros, aproximadamente el doble de Bulgaria.
Imagen: picture-alliance/dpa/VisualEyze
Francia, el país de los propietarios
Los franceses poseen en promedio una mayor riqueza que los alemanes. Con un patrimonio neto de 26.500 euros (2018) per cápita, los franceses poseen casi 10.000 euros más, según los datos de Allianz. Una de las razones es que los alemanes no poseen muchas propiedades. Por otro lado, mucha gente en Francia posee una segunda casa en el campo.
Imagen: picture alliance/prisma/K. Katja
Italia: sin crecimiento, casi sin reformas y una deuda alta
Italia fue especialmente golpeada por el coronavirus en Europa. De hecho, la ciudad de Bérgamo ocupó los titulares en todo el mundo. Tras veinte años de estancamiento económico, Italia es uno de los portavoces en la distribución de los fondos de ayuda por coronavirus en la UE. El país posee un producto interno bruto (PIB) per cápita de 29.610 euros (2018), justo por debajo de la media de la UE.
Imagen: AFP/P. Cruciatti
España: gran temor por una segunda ola
Luego de un fuerte incremento de las infecciones por COVID-19, las autoridades de Cataluña impusieron un nuevo toque de queda durante julio. El país es muy dependiente del turismo, que representa más del 15 % del PIB. Con una producción económica per cápita de 26.440 euros (2018), España se encuentra por debajo de la media de la UE, que es equivalente a cerca de 31.000 euros.
Imagen: Reuters/N. Doce
Suecia: gran riqueza, impuestos altos, sin confinamiento
Suecia trató luchar contra el coronavirus sin confinamiento, lo que significó un número de muertes comparativamente alto. Con una producción económica de 46.180 euros per cápita en 2018, Suecia ocupa el quinto lugar detrás de Luxemburgo, Irlanda, Dinamarca y los Países Bajos, según Eurostat. Suecia se situó un poco mejor que Francia en 2018, con un patrimonio neto de 27.511 euros.
Imagen: imago images/TT/J. Nilsson
Países Bajos: alto rendimiento económico y mucha riqueza
Los Países Bajos, junto a Suecia, Dinamarca y Austria, componen a los cuatro "países frugales", que rechazan las transferencias económicas millonarias a países que no realicen reformas estructurales, como Italia. Con una producción económica de 46.800 euros per cápita (2019), los Países Bajos lideran la UE en términos de fortuna, con activos netos de más de 60.000 euros per cápita (2018).
Imagen: picture-alliance/robertharding/F. Hall
Alemania: un Estado rico, pero con ciudadanos no tan ricos
Hasta ahora, Alemania ha resistido exitosamente frente a la pandemia. Sin embargo, los costos han sido enormes, las exportaciones se derrumbaron y muchas empresas luchan por subsistir. Si bien es cierto que es la mayor economía de la UE, con una producción económica per cápita de 41.340 euros (2019), los alemanes tienen activos netos per cápita de sólo 16.800 euros (2008). En Italia es el doble.