Alertan sobre superbacterias a quienes viajen al extranjero
9 de junio de 2021
Investigadores concluyeron que quienes regresaron de un viaje al extranjero trajeron en sus estómagos bacterias resistentes a los medicamentos antimicrobianos, lo que influye en la eficacia de los antibióticos comunes.
Investigadores estadounidenses y holandeses han estudiado los efectos de los viajes internacionales sobre las bacterias de nuestro estómago, analizando las heces de 190 viajeros holandeses antes y después de visitar sitios turísticos de África o Asia.
Luego de regresar a sus países, las pruebas de los viajeros mostraron una "cantidad significativa" de genes bacterianos resistentes a los medicamentos antimicrobianos, que hacen que el uso de antibióticos de uso común sea ineficaz.
Los investigadores también observaron que un tercio de los participantes que viajaron al sudeste asiático tenían un gen resistente a un antibiótico de "último recurso", los que se utilizan por ejemplo para tratar infecciones como neumonía o meningitis.
"Estos resultados muestran claramente que los viajes internacionales implican el riesgo de propagar la resistencia a los antimicrobianos en todo el mundo", dijo Alaric D'Souza, coautor de este trabajo.
Las bacterias se vuelven más resistentes a los antibióticos
Los genes de estas "superbacterias" generalmente se desarrollan naturalmente durante milenios cuando se exponen a antibióticos producidos por otras bacterias en su entorno. Sin embargo, el uso habitual de antibióticos por parte de los seres humanos ha acelerado este proceso.
El estudio advierte que esta tendencia amenaza 70 años de progreso en los tratamientos de enfermedades infecciosas. Según los investigadores, los genes resistentes varían según los lugares visitados.
Los científicos estaban particularmente preocupados por los viajeros que regresaban del sudeste asiático con el gen mcr-1, resistente a la colistina, un antibiótico de "último recurso" que se usa cuando otros ya no funcionan.
"Es vital que abordemos la resistencia a los antimicrobianos en los países de bajos ingresos, con altas tasas de resistencia y bajos presupuestos de salud pública. Este enfoque internacional no solo ayudará a los países en cuestión, sino que también puede beneficiar a otros al reducir la propagación internacional de genes resistentes", concluyó Alaric D'Souza.
JU (afp, genomemedicine.biomedcentral.com)
Bacterias en la comida: la higiene es fundamental
A menudo se producen enfermedades debido a la presencia de bacterias en los alimentos. Aquí les mostramos las causas más comunes, y cómo evitarlas.
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Aflatoxinas: muy comunes y peligrosas
Las aflatoxinas son micotoxinas, es decir, toxinas producidas por hongos. Los hongos más conocidos son los del género Aspergillus, presentes en el maíz, el trigo, las nueces y ciertas semillas. Estas toxinas destruyen cerca de un 25 por ciento de las plantas y frutas en todo el mundo, según la OMS. Son tóxicas para el ser humano, y se las relaciona con el cáncer de hígado y con cirrosis hepática.
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Cirrosis hepática y cáncer
Ya en pequeñas cantidades, las aflatoxinas pueden producir malformaciones en el embrión y el feto. En altas concentraciones, esta toxina produce cirrosis y necrosis hepática y hasta cáncer de hígado. No se destruyen al cocinarlas, por eso es importante cuidar siempre de que los alimentos no contengan ningún tipo de hongos.
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Salmonelas: el enemigo en el pollo
Las salmonelas son bacterias presentes en el aparato digestivo de muchos animales. La infección con salmonelas, o salmonelosis, se produce cuando no se cumple con la higiene necesaria al preparar carnes crudas, hierbas o semillas. Hay que cocinar los alimentos a 70 grados y lavarse las manos, así como lavar bien y desinfectar los utensilios, cuando se cocina carne cruda, por ejemplo, pollo.
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Escherichia coli y EHEC
La Escherichia coli es una bacteria presente en nuestro intestino, que cumple funciones muy importantes. Puede provocar enfermedades, sobre todo en personas con un sistema inmunitario debilitado. Especialmente peligrosa es la Escherichia coli enterohemorrágica (EHEC), una enterobacteria que produce toxinas que provocan infecciones intestinales graves que pueden ser letales.
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Bacterias en las verduras crudas
Tanto las salmonelas como las enterobacterias mueren al ser cocinadas a un mínimo de 70 a 80 grados. Pero también las hojas de lechuga, los pepinos y los tomates pueden estar contaminados. Por eso, si se consumen crudas, las verduras deben comprarse bien frescas y lavarse concienzudamente.
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Listerias: raras pero muy peligrosas
Las listerias son bacterias que se adaptan muy bien a cualquier terreno, y eso incluye nuestros alimentos. En el organismo humano, la listeriosis puede producir sepsis y meningitis, sobre todo, en niños y ancianos. Por eso es importante hervir los alimentos crudos, como mínimo, a 70 grados centígrados durante 10 minutos.
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Cuidado con los virus
El norovirus es una de las causas más comunes de gastroenteritis. La falta de higiene en la preparación de alimentos es una vía de entrada para los virus en el organismo. El norovirus vive hasta 12 días en las verduras y en la carne. La mejor manera de prevenir enfermedades sigue siendo lavarse bien las manos, no solo cuando es época de resfriados. Y cocinar los alimentos a 70º C como mínimo.
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Lavarse las manos antes de cocinar
Los alimentos pueden estar contaminados ya durante su producción y, si no tomamos medidas de higiene, durante su preparación en casa. Es bueno saber que con algunas reglas simples de higiene podemos evitar enfermedades de todo tipo. Y la primera regla es lavarse las manos a conciencia antes de comenzar a cocinar.
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Las reglas de oro de la higiene en la cocina
Para preparar carnes crudas, usar siempre cuchillos y superficies para cortar que no estén en contacto con las verduras crudas. Otra cosa: al comprar alimentos congelados, hay que colocarlos en una bolsa aislante de inmediato para no interrumpir la cadena de frío. Las carnes y los pescados se deben cocinar a un mínimo de 70º C y deben ingerirse de inmediato, y no guardarse para más tarde.