La historia de un niño pastor de alpacas aficionado al fútbol y la lucha campesina contra la contaminación minera en los majestuosos Andes hicieron que "Raíz”, película del peruano Franco García Becerra, fuera ovacionada en su debut en la sección Generación de la Berlinale.

En esta categoría se proyectan cintas dirigidas a un público infantil y juvenil, narradas desde la perspectiva de sus jóvenes protagonistas, pero que también sirvan de reflejo para los adultos.

En la cinta, hablada íntegramente en quechua, Feliciano, un niño de ocho años interpretado por Alberth Merma, pasa sus días pastoreando alpacas en la remota región andina de Quispicanchis, en Cusco, Perú, a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar.

El pequeño sueña con ver a la selección peruana de fútbol en un Mundial y sigue de cerca las eliminatorias para Rusia 2018. Sobre ello habla con sus fieles amigos: su alpaca Ronaldo y su perro Rambo.

Mientras la emoción de Feliciano crece con cada partido, su comunidad enfrenta una realidad amenazante: la contaminación de un lago debido a la minería, que pone en peligro sus pastos y, en consecuencia, la vida de sus animales.

Una empresa minera trata de convencer a los pobladores para que vendan sus tierras, pero al ver la resistencia de estos, recurre a medios radicales de intimidación y terminan degollando a varias alpacas. A pesar de las evidencias, las autoridades ignoran los llamados de ayuda.

Cuando un día desaparecen Ronaldo y Rambo, Feliciano emprende una búsqueda desesperada.  

Distintas realidades

Para el director era importante hacer visible la problemática real de la contaminación minera que afecta a una población a través del sueño de un niño en un país con distintas realidades.

"El camino al Mundial de Rusia mostró un marcado contraste entre la felicidad compartida y las diferentes realidades que se viven en nuestro país", dijo García Becerra, tras la presentación del filme en la capital alemana.

"La película es una contraposición de la belleza del lugar, que podría verse destruida por cualquier amenaza. Esta fue la sinergia perfecta para contar esta historia", comentó el realizador de "Raiz", producción peruano-chilena escrita por Anamarie Gunkel y Alicia Quispe.

En esa misma línea, la actriz Nely Huayta, que interpreta a la madre de Feliciano, expresó que la cinta es solo una fotografía de lo que ocurre en sus tierras.

"La Pachamama es nuestra Madre Tierra, ella nos cuida y nosotros la cuidamos a ella. Los animales son como si fueran nuestros hermanos. Eso es parte de la cosmovisión andina", señaló Huayta.

Todo ello, según el director García Becerra, sin dejar de mantener el espíritu del personaje de Feliciano, mostrando su vida cotidiana en los Andes peruanos: "A él lo abraza este lugar, las lagunas, el viento, las nubes, que es parte de la cotidianidad de la gente".

Esa cotidianidad se logra percibir cuando un eufórico Feliciano trata de escuchar los partidos clasificatorios a través de su pequeña radio: al perder la señal, corre por el campo al lado de sus alpacas, moviendo las antenas del aparato para estabilizar su conexión.  

Llevar más lejos el mensaje

Encontrar al reparto del largometraje, pero sobre todo al niño protagonista fue complicado, contó el cineasta. Junto a su equipo, visitaron distintas escuelas en los pueblos aledaños a Ocongate, donde encontraron a Alberth.

"En una primera prueba frente a cámaras estuvo tímido, pero luego de un taller nos terminó de convencer; cuando nos invitó a su casa en el pueblo de Upis salió, de repente, a jugar con su alpaca y su perro, y tras ver esa complicidad dijimos: él es”, recordó García Becerra. 

Por su parte, Alberth, que llegó al estreno de la película vistiendo un chullo y chaleco coloridos típicos de su región, expresó su alegría de estar por primera vez en Berlín y contó brevemente su experiencia durante el rodaje: ”La grabación fue increíble, porque jamás había grabado películas ni había visto cámaras". 

Ahora, los realizadores y el reparto esperan llegar a más lugares con el mensaje que aborda "Raíz".

"Nuestro sueño es llegar más lejos. En Ocongate, nosotros criamos alpacas, vacunos, cuyes y otros animales, por eso luchamos contra la minería", insistió José Merma, quien es el padre de Alberth y en la película da vida al campesino Justino: "Ese es nuestro objetivo".

(rml)